El gobierno colombiano afirma que no hay ningun dato sobre supuesto plan para atentar contra fiscal

El gobierno de Colombia informó hoy que “ningún organismo de inteligencia” tuvo información acerca de un supuesto plan del Ejército de Liberación Nacional (ELN) para atentar contra el fiscal general Francisco Barbosa en medio de las negociaciones de paz, y el presidente Gustavo Petro advirtió al respecto que “un alto funcionario del estado se ha dejado engañar”.
Un comunicado del Ministerio de Defensa señala que ni la cartera ni el Ejército “ni ningún organismo que integra la comunidad de inteligencia” tuvieron datos que sostengan la denuncia de Barbosa del 8 de agosto de un supuesto plan para matarlo.
El texto afirma, además, que tampoco se recibió “información de organismos extranjeros” sobre el punto.
Barbosa denunció que el ELN -en pleno proceso de negociaciones de paz con el Gobierno- planeaba atentar contra su vida y que el plan estaba siendo armado en Venezuela.
El fiscal general llegó a reunirse con el secretario general de la OEA, Luis Almagro, para denunciar el caso y a pedir medidas de protección a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
“Un alto funcionario del Estado se ha dejado engañar. Siempre personalmente le he ofrecido mi apoyo para la seguridad que requiere como es mi deber, y lo seguiré haciendo. Nunca supimos de un plan de atentado en su contra sino por su propio comunicado público”, escribió Petro en su cuenta de la red X (antes Twitter).
Y siguió: “El origen de su engaño tiene que ver con los procesos para verificar fuentes. Más profundos en inteligencia militar que en la fiscalía. A ambas entidades llegó la misma fuente, más rápido le llegó su información al funcionario sin mayor verificación y la hizo pública”.
El mandatario advirtió que “el prejuicio y señalamiento irresponsable de carácter político al presidente de la república desdice del respeto a las instituciones y solo muestra el afán para que el procedimiento constitucional de reemplazo de fiscal no se verifique”.
Barbosa, opuesto al proceso de paz con los grupos armados, se enfrentó al gobierno y especialmente a Petro desde la asunción misma del exalcalde de Bogotá y debe dejar el cargo en febrero de 2024.
Las fuentes de su denuncia, presuntamente, eran la inteligencia militar de las Fuerzas Militares, el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) y un funcionario de policía judicial.
Pero Defensa fue tajante en que “se pudo comprobar que ningún organismo que integra la comunidad de inteligencia manifestó haber tenido información sobre la mencionada intención terrorista”.
Petro ya presentó la terna de candidatos a reemplazar a Barbosa.
La denuncia de Barbosa decía que también se buscaría atacar a la senadora María Fernanda Cabal (Centro Democrático, uribista) y al general Eduardo Zapateiro.
La vicefiscal Martha Mancera había señalado en conferencia de prensa que a a la dependencia llegaron tres fuentes diferentes y en distintos momentos sobre el supuesto plan, atribuido al ELN.
"Se pudo comprobar que ningún organismo que integra la comunidad de inteligencia, en desarrollo de sus labores propias, manifestó haber tenido información adicional a la existente sobre la mencionada intención terrorista", expresó Defensa en el texto, publicado en la red X (antes Twitter).
La Fiscalía, en tanto, lamentó que Inteligencia “ha restado importancia a pretensiones” del ELN e instó a que "se verifique con rigurosidad este escenario de amenaza real y se tomen urgentes medidas en beneficio de la institucionalidad, la seguridad y la vida de las personalidades involucradas, y la ciudadanía en general".
Un día después de la denuncia de Barbosa, el gobierno de Venezuela también abrió una investigación al respecto.
Caracas es sede, justamente, de la cuarta ronda de conversaciones entre el Ejecutivo y la última guerrilla reconocida como tal en el país. (Télam)