SOLÁ: “MADURO NO FUE INVITADO A LA ASUNCIÓN DEL PRESIDENTE FERNÁNDEZ”

El canciller Felipe Solá afirmó hoy que la decisión de no invitar al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a la asunción de Alberto Fernández fue "una medida estratégica" ya que el gobierno argentino entendió que era conveniente tener una postura más neutral ese día".
Por otra parte, remarcó que existe una "buena relación" con los Estados Unidos y que esto se puede desarrollar pensando a veces "diferente".
"Nicolás Maduro no fue invitado. Estimamos que era mejor una cierta neutralidad ese día", explicó el canciller en FM Metro respecto a la ausencia del venezolano durante la asunción del Presidente.
"Hay seis o siete países de América Latina con los que queremos tener una relación positiva, y nos interesa recrear un organismo latinoamericano, y esos países están claramente en contra de Maduro. Por lo tanto, es una medida estratégica nuestra", dijo.
Agregó que "unos días antes de traspaso presidencial, el gobierno de EEUU le había pedido a Alberto Fernàndez una gestión importante frente a Maduro, el Presidente la hizo, y fue exitosa. Pero luego un ministro (de EEUU) se ofendió. Allá él".

Felipe Solá.

Solá hizo así referencia al asesor de Donald Trump en la Casa Blanca Mauricio Claver-Carone, que se fue del país el martes pasado al advertir que estaba presente en la asunción del presidente Fernández un enviado del gobierno de Venezuela, Jorge Rodríguez, titular de la cartera de Información del país caribeño.
"El presidente Fernández consiguió lo que pedía el gobierno norteamericano a través de un secretario de Estado. Después, ofenderse porque viene un ministro nos parece una sobreactuación. Al día siguiente tuvimos una larga reunión y un almuerzo con el subsecretario (Michael) Kozak y el embajador (Edward) Prado. El tema esta superado", resumió el funcionario.
Por otra parte, respecto de la relación con Estados Unidos, el canciller manifestó que "no
pensamos igual, pero estamos acostumbrados a tener una idea y que ellos tengan otra. Planteamos que nos respetemos y tengamos la mejor relación posible, y ellos están de acuerdo en eso".
"Son posicionamientos sobre qué pensamos de cada situación. Y hemos planteado una relación en la que no hubiera sorpresas. Una buena relación es la que se puede pensar distinto en algunas cosas y mantener una relación amistosa y frecuente", explicó Solá.

También, hizo referencia a la situación de Bolivia y la llegada de Evo Morales al país, la cual, segú dijo, tuvo que ver con "la necesidad" del ex mandatario boliviano de "estar cerca de sus hijos", y remarcó su carácter de "refugiado".
En diálogo con FM Metro, Solá afirmó que "Evo tenía necesidad de estar cerca de sus parientes, sus hijos están acá".
"A cinco ciudadanos que pidieron asilo hace unos días, algunos estaban en el país y otros no, se lo concedió el Gobierno a través de Cancillería para que pudieran entrar al país. Entraron, y anoche llegó (Álvaro) García Linera (ex vicepresidente de Bolivia). Una vez que entraron firmaron un pedido de refugio, que es una cosa distinta del asilo", aclaró el funcionario.
"El asilo no tiene ningún tipo de reglamentación, sólo protege de extradición, mientras que el refugio tiene normas que implica una serie de relaciones con el Estado a partir de ese momento", dijo.
No obstante, Solá negó que esas condiciones tengan que ver con "restricciones".
"El refugio se le da cuando el Gobierno considera que esa persona no tiene seguridades en su país sobre su vida. Consideramos que es así en el caso de Evo Morales, y de las cinco personas" antes mencionadas.
"La ley argentina dice que tiene que cumplir con la Constitución, con las leyes e informar sobre movimientos fuera del país a la Comisión Nacional que le concedió el refugio. Pero no dice nada sobre declaraciones políticas", dijo Solá.
Y aclaró que la decisión de que el ex presidente boliviano no formule declaraciones políticas públicas tuvo que ver con un "acuerdo personal con el presidente" Alberto Fernández.
"Fue un acuerdo político personal. Es una decisión del Presidente concertar con Evo Morales su condición de refugiado y esas cuestiones. Que no haga declaraciones políticas públicas políticas", dijo.
Y aclaró que "no tiene nada que ver el gobierno de Bolivia en esto. Es una decisión nuestra. Ningún gobierno nos puede decir qué condiciones ponerle a alguien. Nos referimos a declaraciones públicas, desde el punto de vista personal cada uno puede hacer política y verse con quien quiera", añadió.
"Supongo que querrá en algún momento ir a su país e intervenir en política, y por otra parte nosotros no queremos dar excusas para que no haya elecciones en Bolivia", insistió Solá.
En tanto, remarcó una vez más que el gobierno argentino no reconoce a las autoridades autoproclamadas en Bolivia: "No reconocemos al gobierno boliviano, es un gobierno de facto, pero sí reconocemos que debe haber elecciones", precisó el funcionario.
Cuando le consultaron si ese proceso eleccionario debía ser con Morales o sin él, respondió: "Es una decisión de Evo Morales, creo que ha tomado la decisión de no ser candidato, así creo que lo ha dicho". (Télam)