A Diego lo vi perdido en marzo, afirma el exfutbolista de Boca Hugo Perotti

El exfutbolista Hugo "Mono" Perotti, compañero de Diego Maradona en el Boca campeón de 1981, afirmó hoy que lo vio "perdido" durante el homenaje que le hicieron en La Bombonera cuando se presentó en marzo con Gimnasia y Esgrima de La Plata, por la última fecha de la Superliga que ganó el equipo "Xeneize".
"Cuando lo vi en marzo estaba perdido, más allá de lo monstruoso que es él y hablo en presente porque no se fue, lo noté mal y le dije que disfrute todo", recordó Perotti sobre la entrega de la placa del pasado 7 de marzo.
Sin embargo, Perotti, crítico con el entorno de Maradona, liderado por el abogado Matías Morla, destacó que tenía "pasajes de lucidez" como cuando le preguntó por su salud, saltó con los hinchas ante la canción contra los ingleses y besó el césped del campo de juego.
"Van a tener que dar muchas explicaciones quienes estuvieron en el entorno. No puede ser que le cerraron los teléfonos a la familia. Lo sacaron de la clínica sin saberse si estaba bien. No es lógico", apuntó sobre el entorno.
De hecho, según relató, tampoco lo dejaron despedirse de Maradona luego del partido, algo que le "dolió" en lo más "profundo" de su "corazón".
Perotti jugó dos partidos con Maradona en el seleccionado Sub-20 y otros tres en la mayor. Además, ambos conquistaron el Metropolitano 1981 con Boca, al punto que Diego lo habilitó en el gol consagratorio frente a Ferro (1-0) en la fecha 32.
Aquella tarde del 2 de agosto de 1981, Maradona agarró la pelota en el medio, se sacó un rival de encima y con un pase de revés con su zurda, lo dejó de cara al gol a Perotti.
"Me tocó ser compañero en Boca, en la selección juvenil y en la mayor, te asombraba adentro de la cancha y afuera vivía como uno más cuando éramos pibes: hacía jodas, se divertía y era un pícaro", rememoró.
Y por último, Perotti detalló una anécdota de su paso por el seleccionado y un viaje al Vaticano. "Una vez nos recibió el Papa Juan Pablo II en el Vaticano en un viaje con la Selección. Primero charló con todos y después le pidió a Maradona a pasar a un salón privado porque lo quería conocer. Diego le tiró 'este rosario es el mismo que le dan a todos, no tiene nada de especial'", cerró. (Télam)