Colombia: Fosa comun en Dabeiba principio de algo mas grande

BOGOTA, 16 DIC - "Lo que estamos viendo el cementerio es la historia de la impunidad y de los crímenes atroces que se han cometido en esta zona", describió hoy Adriana Arboleda, directora de la Corporación Jurídica Libertad, sobre el hallazgo de un fosa común en Dabeiba.
Hace apenas dos días la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), el tribunal creado tras la firma de la paz con las FARC, reveló que se encontraron siete cuerpos de víctimas de "agentes del Estado" en el cementerio Las Mercedes del municipio de Dabeiba (noroeste).
El hallazgo se logró a través del testimonio de un exmilitar que se acogió a la JEP y que habría avisado que al menos 50 cuerpos de personas, que nada tenían que ver con el conflicto armado interno, fueron asesinadas y enterradas en una fosa común.
Arboleda sostuvo que la versión del exuniformado coincide con testimonios en la zona recogidos por ellos, a lo que se suma la presencia en su momento de bases militares en esa región del departamento de Antioquia.
Añadió que su Corporación le pidió a la JEP que también revise otros cuatro cementerios que están en el mismo entorno, al advertir que los parientes de desaparecidos y asesinados creen que al menos 100 personas podrían estar enterradas en esos lugares.
Describió que las personas que estarían en la fosa común de Dabeiba y en los otros cementerios de la región son jóvenes pobres de Medellín a quienes les ofrecieron supuestos trabajos y luego asesinaron, además de campesinos de la región, en lo que se ha dado en llamar localmente como "falsos positivos".
Esos crímenes de Estado se registraron durante el gobierno de Alvaro Uribe (2002-2010) y consistieron en ofertas de varios tipos a militares a cambio de aumentar y presentar bajas de supuestos guerrilleros.
Lo que sucedió es que uniformados engañaron con falsas ofertas de trabajo a jóvenes en distintos lugares del país, los llevaron a parajes desolados y allí los asesinaron, luego los hicieron pasar por rebeldes y cobraron lo que sus superiores les ofrecían.
Este tipo de crímenes han sido revelados por distintas fuentes: desde periodistas, académicos, hasta los mismos militares inculpados, que se cuentan por decenas y muchos de los cuales se acogieron a los beneficios que ofreció la JEP, a cambio de contar la verdad y reparar a sus víctimas.
"En la medida en que la Jurisdicción Especial para la Paz le brinde las garantías a los agentes estatales para que digan toda la verdad se podrá romper ese pacto de silencio e impunidad que ha rodeado a las fuerza armadas", confió Arboleda.
(ANSA).