El Senado de México rechazó hoy por segunda vez la terna de candidatas presentadas por el presidente, Andrés Manuel López Obrador, para ocupar la vacante en la Suprema Corte de Justicia, por lo que por primera vez en la historia del país será el mandatario quien ejerza su potestad de designar directamente a la jueza.
López Obrador afirmó que hoy mismo dará a conocer el nombre de la nueva ministra de la Corte, pero dijo que tiene que pensarlo, informaron los diarios mexicanos El Norte y Reforma.
Luego de una larga sesión de más de trece horas en la que no se pudieron salvar las discrepancias entre el bloque oficialista y la oposición, Bertha Alcalde Luján, Lenia Batres Guadarrama y Eréndira Cruzvillegas fueron rechazadas tras una votación en la que ninguna alcanzó el respaldo de las dos terceras partes de los senadores presentes, informó la agencia de noticias Europa Press.
De los 121 votos emitidos, en la primera ronda, Batres Guadarrama obtuvo 33, Alcalde Luján 29 y Cruzvillegas 12, por lo que se procedió a una segunda votación en la que 54 votos fueron para Batres, 16 para Alcalde y 2 para Cruzvillegas, muy lejos de los 81 votos requeridos para la mayoría calificada.
También hubo tres votos nulos y 46 en contra de todas las candidatas de la terna, según el diario mexicano El Universal.
El rechazo a esta terna se produce dos semanas después de la falta de consenso con el primer trío presentado López Obrador, en el que también estaba Alcalde Luján y Batres Guadarrama, junto a Estela Ríos González.
La terna es para reemplazar al expresidente del máximo tribunal, Arturo Zaldívar, quien renunció a su cargo para sumarse al equipo de campaña de la candidata oficialista a la Presidencia, Claudia Sheinbaum.
El primer trío fue rechazado por la Cámara alta por considerar que todas ellas eran cercanas al mandatario.
La Constitución Política establece que en caso de que el Senado no logre la mayoría calificada para designar a un ministro o ministra de la Corte, el presidente tiene la facultad para nombrar directamente a quien ocupará el cargo.
Desde la oposición recalcan que el nombramiento de su sucesor o sucesora debería corresponder al próximo presidente del país.
En caso de que finalmente el nombramiento de la nueva magistrada del Supremo se produzca durante el mandato de López Obrador, ascenderían a cinco los miembros del máximo órgano judicial nominados por el presidente. (Télam)