Hunter Biden, hijo del presidente de Estados Unidos Joe Biden, denunció al dueño de una tienda de reparación de computadoras en la que olvidó su portátil por presunta violación de su intimidad, después de que su contenido se filtrara a aliados del expresidente Donald Trump, informaron hoy medios locales.
Según la acusación, John Mac Isaac entregó información que contenía el disco duro del ordenador a los "enemigos políticos" de Joe Biden para ayudar durante la campaña electoral de 2020 a Trump, que en varias ocasiones hizo referencia a los supuestos escándalos del ahora jefe de la Casa Blanca.
"Mac Isaac tenía la intención y sabía, o claramente debería haber sabido, que las personas a las que proporcionó los datos que creía que pertenecían al señor Biden los usarían contra el entonces candidato Joe Biden y para ayudar al entonces presidente Trump", explicó el equipo legal de Hunter Biden.
El hijo del mandatario acusó a Mac Isaac y otras personas de seis cargos de invasión de la privacidad, incluida la conspiración para obtener y distribuir información privada, según el informe.
Los datos personales se pusieron a disposición de terceros y, en última instancia, del público en general, lo cual es "muy ofensivo y daña" a la reputación de Biden, añade la demanda, que argumenta que el objeto de la supuesta invasión a la privacidad y la difusión de sus datos no tenía ningún propósito legítimo, sino causar daño y vergüenza.
La demanda es una respuesta a otra presentada en enero por el propio Mac Isaac contra Hunter Biden, el excongresista Adam Schiff y varios medios de comunicación como CNN y el portal Politico, a quienes denunciaba por acusarlo de formar parte de una trama rusa para socavar la democracia y las elecciones presidenciales en Estados Unidos.
El contenido del dispositivo, que Trump calificó como "el ordenador portátil del infierno", generó dudas no solo sobre las finanzas de Hunter Biden, objeto de varias investigaciones de la Fiscalía de Delaware desde 2018, sino también por supuestas conductas irregulares, como escándalos sexuales y consumo de drogas del hijo del presidente, que se reflejaron en varios medios.
Entre quienes tuvieron acceso a ese material antes de que se publicara está el que fuera abogado personal de Trump y exalcalde de Nueva York, Rudy Giuliani, así como algunos de sus asesores más cercanos, como Steve Bannon, tal como ellos mismos reconocieron.
Biden nunca admitió ser el dueño del aparato, que según la versión de Mac Isaac lo dejó "abandonado" en 2019 en la tienda que tenía en Wilmington, Delaware, aunque su equipo legal sí reconoció que parte de la información que trascendió sería suya, sin precisar cuál.
"Esto no supone admitir por parte del señor Biden que Mac Isaac poseyera algún portátil que contuviera datos almacenados que pertenecieran a él. Más bien, reconoce que, en algún momento, Mac Isaac obtuvo datos almacenados, algunos de los cuales pertenecían al señor Biden", argumentan sus abogados, citados por las agencias de noticias Europa Press y Sputnik.
En ese sentido, remarcaron que independientemente de cómo Isaac y otras personas obtuvieron ese material, el hecho es que se accedió a ellos de manera indebida, siendo además copiados y compartidos sin su autorización.
Las historias y rumores sobre el supuesto contenido de la computadora formaron parte de los argumentos utilizados por Trump durante la campaña electoral, e incluso en los debates televisivos, para atacar a Joe Biden, a quien le recordaba con insistencia todo lo relacionado con esta cuestión.
La demanda se conoce mientras una comisión de la Cámara de Representantes, bajo control republicano, investiga los negocios internacionales del hijo y otros familiares de Biden.
Los republicanos acusan a Hunter Biden de haber utilizado en beneficio propio el nombre y los contactos de su padre cuando este era vicepresidente de Barack Obama para establecer contratos turbios en China y Ucrania. (Télam)