La Unión Europea (UE) abrió hoy la puerta a que, en aras de "un enfoque integrador", el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, sea invitado a la cumbre de líderes entre del bloque europeo y de Latinoamérica, que se celebrará en julio en Bruselas.
"Estamos a favor de adoptar un enfoque integrador de la participación en la cumbre", dijo el comisario de Gestión de Crisis europeo, Janez Lenarcic, en una entrevista con la agencia de noticias Europa Press, previa a la conferencia de donantes de Venezuela, al ser preguntado sobre la eventual presencia de Maduro.
El comisario insistió en que la cita de julio será una oportunidad para intercambiar puntos de vista sobre la agenda compartida entre Europa y Latinoamérica y sobre temas de interés común, "así como sobre cuestiones de interés en las que discrepamos y mantenemos posturas diferentes".
La cumbre de líderes UE-Latinoamérica se celebrará del próximo 17 y 18 de julio en la capital belga, y será el primer gran evento organizado por España en su presidencia temporal del Consejo Europeo que asume en el segundo semestre de este año.
Lenarcic aclaró que cada bloque regional será el encargado en última instancia de invitar a sus miembros de cara a la cumbre de julio.
También reclamó al Gobierno y oposición de Venezuela avanzar en "temas políticos cruciales" en el marco de las negociaciones que tienen lugar en México, tras conseguir los primeros acuerdos en materia humanitaria el pasado año.
Lenarcic indicó que pese a los primeros pasos dados en el diálogo el pasado noviembre, "hay más asuntos cruciales de índole política que necesitan abordarse".
Bruselas defiende que las negociaciones entre venezolanos es "el único camino" a una salida sostenible de la crisis, y subraya la necesidad de realizar progresos, después de haber expresado su voluntad de adaptar la posición de la UE a la nueva realidad en el país sudamericano.
"Pedimos a las partes que negocien de buena fe y acuerden soluciones que mejor reflejen los intereses de los venezolanos", ha reiterado el responsable comunitario de gestión humanitaria.
En octubre pasado, el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, defendió, en línea similar, la necesidad de sentarse con Venezuela, Nicaragua y Cuba en cumbres regionales de la UE y Latinoamérica.
Así lo hizo en la conferencia de prensa posterior a la reunión de los cancilleres de la UE y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), que se celebró en Buenos Aires, cuando señaló que aunque las relaciones con algunos gobiernos son difíciles, los 54 países que conforman las dos regiones no pueden "estar de acuerdo en todo", e impulsó la necesidad de "verse más, discutir más y cooperar más". (Télam)