Un policía cordobés mató a balazos a un joven al que acusó de intentar robarle el teléfono en una fiesta clandestina en la ciudad de Córdoba, durante un tiroteo en el que también él fue baleado y por el cual la justicia decidió imputarlo, informaron hoy fuentes judiciales.
El hecho sucedió en la madrugada de ayer cuando el oficial, que está internado en el Hospital de Urgencias en grave estado tras recibir dos disparos, acusó al joven fallecido de robarle el celular y, en un intercambio de disparos, lo mató.
El incidente se dio en el marco de una fiesta clandestina que se llevaba a cabo en el barrio Parque Las Rosas de la capital provincial y durante el hecho también fue baleado un adolescente de 17 años, que fue internado aunque fuera de peligro, dijeron los voceros
La fiscalía Distrito 2 Turno 4, a cargo del Víctor Hugo Chiapero, resolvió imputar al agente Mario Rosa (27) por el delito de "homicidio agravado por el uso de arma de fuego".
El policía fue operado y continúa con su evolución por la complicación que le generó uno de los impactos de bala en la zona del hígado.
El fallecido, en tanto, era un joven de 21 años, que recibió un disparo en el abdomen y otro en la axila izquierda, mientras que el que otro chico, de 17 años, recibió un disparo en un glúteo y está fuera de peligro.
Fuentes policiales confirmaron a medios locales que el oficial culpó al chico de 21 años de robarles el celular a él y a un guardia de seguridad del lugar, por lo que intentó echarlo de la fiesta.
En esas circunstancias, de acuerdo a la versión policial, se produjo un enfrentamiento armado en la calle Bucarest al 4200 que terminó con el joven fallecido, el adolescente herido y el policía baleado.
El hermano del fallecido aseguró que la víctima "no tenía antecedentes penales y no andaba en nada raro", dijeron las fuentes. (Télam)