Un hombre de 42 años fue condenado a 14 años de prisión por abusar sexualmente de su hijastra en una vivienda de Tilisarao, localidad ubicada a 225 kilómetros al norte de la capital de San Luis, informaron hoy fuentes judiciales.
La joven realizó las denuncias en 2019, primero por violencia familiar, y luego por abuso sexual, cuando tenía 19 años.
Según las fuentes, la víctima relató que los abusos sexuales iniciaron desde que tenía 7 u 8 años, y que los ultrajes continuaron de forma reiterada hasta unos meses antes de la primera denuncia.
En 2020, el acusado, identificado como M.C.I. ahora condenado fue procesado con prisión preventiva como presunto autor del delito de abuso sexual con acceso carnal, agravado por cometerse contra una persona menor de 18 años aprovechando la situación de convivencia preexistente.
Durante el debate oral, M.C.I. prestó declaración negando su autoría en los hechos, mientras que el fiscal de Cámara manifestó no tener dudas sobre su autoría y solicitó la imposición de una pena de 14 años de prisión.
Los atenuantes fueron la ausencia de antecedentes penales y los agravantes: el aprovechamiento de la inmadurez de la víctima, el aprovechamiento de la nocturnidad para lograr su cometido y la extensión del daño causado.
La defensa del condenado manifestó no entender en base a qué prueba el fiscal sostuvo su acusación y el “semejante pedido de pena”, remarcó que no fueron debidamente determinadas las circunstancias de modo, tiempo y lugar, y que tampoco ninguno de los testigos pudo determinar por qué la madre o los hermanos de la joven habrían ocultado semejante situación de violencia familiar.
Aseguró que a lo largo de todo el proceso existió un “absoluto déficit probatorio, prueba indiciaria no coincidente, no concordante, que se contrarresta totalmente con las periciales médicas, con la historia clínica”.
Por ese motivo, solicitó que por aplicación y en resguardo del principio de legalidad, del principio de inocencia y el beneficio de la duda, su representado fuera absuelto libre de culpa y cargo, “señalando además que es un hombre que tiene una discapacidad del 90% en su visual, y que en su relato manifestó ser él víctima de semejante falsa imputación”.
Finalmente, por unanimidad, el tribunal resolvió declarar al hombre culpable del delito de abuso sexual con acceso carnal, agravado por ser cometido contra una persona menor de 18 años aprovechando la situación de convivencia, en un número indeterminado de hechos los que concurren en forma real y lo condenó a la pena de 14 años de prisión, accesorias legales y costas procesales. (Télam)