El candidato a la presidencia de Nicaragua Félix Maradiaga fue detenido hoy por la policía después de que compareciera ante la Fiscalía como parte de una investigación "por actos que menoscaban la independencia del pueblo", lo que lo convierte en el tercer opositor en ser arrestado en los últimos días, a cinco meses de las elecciones generales.
Maradiaga confirmó tras ser interrogado durante tres horas por la Fiscalía que está siendo investigado por financiación y autoría intelectual del supuesto golpe de Estado que se habría intentado ejecutar a través de las manifestaciones antigubernamentales que ocurrieron en 2018.
A su vez, también es investigado por sus actividades en el Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Pública (Ieep), disuelto desde diciembre de ese mismo año, informó el diario local La Prensa.
Candidato por la coalición Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) explicó que las acusaciones son "una sumatoria de varias cosas" y agregó que las preguntas de la Fiscalía se focalizaron en su "activismo internacional" en organismos como la Organización de Estados Americanos (OEA), o el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, así como las razones de sus viajes al exterior.
Tras confirmarse su detención, su equipo de campaña, a través de un comunicado emitido en redes sociales, exigió su puesta en libertad y rechazó las acusaciones en su contra.
A su vez, denunció la falta de independencia de la Fiscalía, a la que calificó de "un instrumento político del régimen del presidente, Daniel Ortega, cuyo objetivo es impedir que haya elecciones libres y transparentes en noviembre".
"Félix Maradiaga ha trabajado para fortalecer la democracia y defender los Derechos Humanos. Esto lo ha realizado en estricto apego a los principios de la no violencia, coherencia ética y amor a Nicaragua", se lee en un texto en el que se denuncia la campaña "injuriosa" que desde 2018 se viene haciendo en su contra, recogió la agencia de noticias Europa Press.
Además de Maradiaga, de 44 años, los también candidatos opositores Cristiana Chamorro y Arturo Cruz fueron apresados en los últimos días, todos ellos, en base a la Ley de los Derechos del Pueblo.
La primera, hija de la expresidenta Violeta Chamorro (1990-1997), está bajo arresto domiciliario por un supuesto delito de blanqueo de dinero.
En los últimos semanas arreciaron las críticas hacia el Gobierno de Ortega por lo que consideran una persecución contra los políticos de la oposición.
La ola de repudios se extendió al plano internacional, con Estados Unidos y la Unión Europea exigiendo la puesta en libertad de Chamorro y del resto de "presos políticos" para que se puedan celebrar elecciones justas y libres.
Nicaragua celebrará comicios generales el 6 de noviembre y se estima que un total de 3,4 millones de ciudadanos acudirán a las urnas para elegir presidente y diputados nacionales, departamentales y del congreso. (Télam)