El presidente francés, Emmanuel Macron, afirmó hoy que el horizonte de "2030 es el nuevo 2050", al subrayar la necesidad de acelerar los esfuerzos globales para mitigar las consecuencias del cambio climático en su intervención en la Cumbre de Líderes sobre el tema convocada por Estados Unidos.
"Un solo objetivo para las próximas semanas y meses: acelerar la puesta en marcha de los compromisos para el horizonte de 2030", dijo el mandatario, quien pidió un "plan de acción preciso, medible y verificable".
"En el fondo, 2030 es el nuevo 2050", sentenció, citado por el diario Ouest France.
En ese sentido, Macron se refirió a la nueva ley climática europea, adoptada esta semana, e instó a "utilizar todos los medios a nuestra disposición" para luchar contra el recalentamiento global, como la "innovación, la transformación y la reglamentación".
También pidió transformar "en profundidad" el sistema financiero y "fijar un precio para la energía ligada al carbón" para integrar la dimensión ambiental en el costo de las inversiones y las relaciones comerciales, en alusión al impuesto al carbono que la Unión Europea quiere instaurar en sus fronteras.
"De otro modo, no habrá ninguna transición", sostuvo y añadió: "Francia tomará todas sus responsabilidades en los próximos meses para avanzar sobre la financiación al servicio del clima".
En su discurso, el líder francés también felicitó a su homologo estadounidense, Joe Biden, por haber fijado un nuevo compromiso de reducir entre un 50% y un 52% las emisiones de gases de efecto invernadero del país para 2030 en relación a 2005.
"Es una elección histórica en el camino que nos lleva hacia Glasgow", dijo en referencia a la ciudad escocesa que acogerá la futura conferencia de la ONU sobre el Cambio Climático (COP26) en noviembre.
Francia forma parre de los numerosos países con retrasos en sus compromisos para alcanzar el objetivo de reducir 1,5 grados la temperatura, reconoció Macron, pero aseguró que tiene una "ambición extremadamente fuerte" y "está acelerando", en especial, en la producción de energía eólica offshore y el aislamiento térmico de las viviendas. (Télam)