La mitad de los exportadores del Reino Unido tienen dificultades tanto económicas como administrativas para adaptarse a los cambios relacionados con el comercio de mercancías entre el territorio británico y la Unión Europea (UE) tras el Brexit, dice una encuesta.
Según el sondeo de negocios más importantes de 2021 realizado por las Cámaras de Comercio Británica, prácticamente la mitad (49%) de los exportadores se enfrentan a dificultades en la adaptación a los cambios en el comercio o bienes después del
1 de enero de este año, en que se concretó la separación del bloque británico de la UE.
Alrededor de 30% de los encuestados reportaron dificultades para adaptarse a los cambios en la mudanza o el comercio de bienes en el primer mes del año, mientras que 45% dijo que el comercio de bienes no era aplicable a su negocio y 16% que era demasiado pronto para decirlo.
Solo el 10% dijo que les había resultado fácil adaptarse a los cambios.
Las empresas también manifestaron sus preocupaciones sobre el aumento de la administración, costos, retrasos y confusión sobre las normas a seguir.
Según el director General de BCC, Adam Marshall, las empresas comerciales y las posibilidades del Reino Unido de una fuerte recuperación económica, se están viendo muy afectadas por los cambios en la frontera.
"El tardío acuerdo comercial entre el Reino Unido y la UE dejó a las empresas en la oscuridad sobre los detalles hasta el último minuto, por lo que no es sorprendente ver que tantas empresas están experimentando dificultades prácticas sobre el terreno a medida que se implementan los nuevos acuerdos", explicó.
El directivo instó al Gobierno británico a hacer todo lo posible para solucionar los problemas que están bajo el control del propio Reino Unido y aumentar su contacto con las contrapartes de la UE para resolver los problemas que están asfixiando el comercio en ambas direcciones.
"Esta situación podría empeorar si el Reino Unido se mantiene firme e introduce controles adicionales en abril y controles aduaneros completos sobre las importaciones en julio. Estos plazos deben cambiar, y el soporte disponible para las empresas que luchan por adaptarse a las nuevas condiciones comerciales aumentó significativamente", alertó.
Sobre los problemas específicos planteados por las empresas en la encuesta, Chris Black, director general de Sound Leisure, una empresa de fabricación del Reino Unido con sede en Yorkshire, destacó algunas de las dificultades a las que se enfrentan las empresas de todo el Reino Unido para comercializar a través de las fronteras después del Brexit.
"Como empresa que exporta entre el 65 % y el 75% de todo lo que fabricamos y la UE es una gran parte de eso, nos preocupan los aranceles, el papeleo adicional y los retrasos en las fronteras", agregó.
"Solo la semana pasada intentamos enviar algunas máquinas a España y el transportista nos aconsejó que la guardáramos aquí durante unas semanas más mientras todo se calmaba. Queda un largo camino por recorrer antes de que comprendamos completamente qué es la nueva normalidad", prosiguió.
(Télam)