El fotógrafo Claudio Larrea inaugura este jueves la exposición "Arquitectura peronista" en el Museo del Bicentenario, un conjunto de imágenes de edificios, parques, barrios y otras construcciones que fueron desarrollados durante los Gobiernos del presidente Juan Domingo Perón como parte de una planificación estatal y que hoy se resignifican como huellas de una estética patrimonial en clave política.
La República de los Niños, en Gonnet, La Plata; las viviendas sociales en Saavedra, Villa Pueyrredón o Parque Avellaneda en la Ciudad de Buenos Aires, o el edificio de la Confederación General del Trabajo (CGT) sobre la calle Azopardo son algunas de esas huellas edilicias que el fotógrafo registra en su pesquisa de la arquitectura peronista y que delinean un imaginario que traza la relación entre planeamiento urbano al servicio del desarrollo social.
De este modo, la exposición de Larrea (Buenos Aires, 1963) entrecruza arte y política y constituye una invitación a descubrir en el ámbito público las marcas concretas de los dos primeros gobiernos peronistas, entre 1946 y 1955: barrios, espacios deportivos, edificios públicos.
Dice el artista Daniel Santoro sobre la obra del fotógrafo: "Larrea encuentra en cada una de sus imágenes, el punto de fuga exacto por donde circulan los recuerdos, ese mundo de las cosas queridas que nos brindará una experiencia de felicidad y melancolía entrañable".
Las 27 imágenes que se pueden ver desde este jueves en el Museo del Bicentenario, sobre avenida Paseo Colón al 100, capturan con sus luces y sombras, sus líneas rectas y perspectivas frontales, las construcciones realizadas durante el Primer Plan Quinquenal (1946-1951) y Segundo Plan Quinquenal (1952-1955), las iniciativas de planificación estatal destinadas al fortalecimiento integral del país.
"En términos estilísticos y estéticos, la principal característica de la arquitectura del período peronista residió en su compleja diversidad: no existió un único conjunto de formas y tipologías arquitectónicas, coexistiendo lenguajes rústicos, variaciones de las corrientes modernas y formas neo clásicas. Cabe recordar la importancia que tuvo la obra pública para el peronismo, al constituir el soporte físico de sus programas, en lo económico, en lo social y sobre todo, en el político", definen desde el museo.
La arquitectura peronista va de viviendas a parque recreativos, de salud a política.
Larrea exhibe las fotografías de la Ciudad Infantil del Servicio Nacional de Rehabilitación, la Escuela Fábrica No 1 de la Nación "Casal Calviño" o el Velódromo que dan cuenta de la preocupación por las infancias, su salud, educación y esparcimiento.
En tanto, los conjuntos de viviendas Juan Perón (Saavedra, 1949), 17 de octubre (Villa Pueyrredón, 1950) y el Barrio Alvear (Parque Avellaneda, 1954), dan cuenta de la necesidad de una pujante clase trabajadora así como la descentralización del espacio urbano.
"Arquitectura peronista" inaugura este jueves 16 de marzo a las 16:30 en el Museo del Bicentenario y se puede visitar con entrada libre y gratuita hasta el mes de mayo. (Télam)