El aeropuerto internacional de Ezeiza presentaba esta mañana un movimiento inusualmente reducido, en el último día de arribos de los vuelos procedentes de Europa y Estados Unidos, con mucha menos gente esperando a los viajeros y vuelos que llegan casi vacíos pero se van con una ocupación de más del 97 por ciento.
Según indicaron a Télam fuentes aeroportuarias, esto se debe a que ante la imposibilidad de ingresar al país de los extranjeros no residentes, los vuelos son ocupados solamente por argentinos que estaban en el exterior y extranjeros residentes, que son los menos.
Hasta media mañana habían aterrizado 14 de los 22 vuelos previstos para hoy desde esos destinos, ya que el resto de los servicios se encontraban demorados, entre ellos los de Alitalia, procedente de Roma y Air Europa, desde Madrid.
Carla y María son dos argentinas que viajaron en el vuelo de Iberia IB6841 que tocó pista a las 8.18. "Estábamos de vacaciones y debimos adelantar el regreso, por suerte conseguimos lugar en este vuelo, que nos dijeron que era el último".
Ricardo llegó en el vuelo LH510 de Lufthansa procedente de Frankfurt, que aterrizó a las 7.40 y comentó: "Estaba trabajand.o en Munich y cuando me avisaron lo que se venía, adelanté el regreso. En la compañía aérea me pudieron resolver la situación porque muchos extranjeros cancelaron y quedó lugar".
Una historia similar vivieron Isabel y Mariana, quienes se encontraban en Connecticutt y adelantaron su regreso a la Argentina un vuelo de American Airlines (AA997) que llegó de Dallas a las 8-55.
Mucha gente con barbijos, sobre todo el personal que trabaja en el aeropuerto y las recomendaciones permanentes para mantener distancia entre las personas, son el factor dominante de un espacio que hasta no hace mucho era ocupado por una multitud, entre los que era casi imposible caminar. (Télam)