El secretario general de la Unión Docentes Argentinos (UDA), Sergio Romero, aseguró hoy que la aceptación por parte de esa organización sindical de la oferta salarial formulada por el Gobierno nacional "no significó de ninguna manera la firma de un cheque en blanco".
Romero, también secretario de Políticas Educativas de la CGT, explicó hoy que "la aceptación en la negociación colectiva de la propuesta del Ministerio de Educación a través de su titular, Nicolás Trotta, no significó la firma de un cheque en blanco".
La conducción de la UDA aceptó la mejora salarial ofrecida por el funcionario, que elevó el salario mínimo inicial a 23 mil pesos desde marzo y a 25 mil pesos desde julio próximo.
El sindicalista advirtió hoy en un comunicado que la UDA realizó "observaciones" sobre “la existencia de sumas no remunerativas en el salario de todos los docentes del país”.
"Es imperioso mantener abierta de forma permanente la vigencia y continuidad de la mesa de negociación para hallar en el más breve plazo posible los caminos tendientes a lograr un salario justo, que es lo que deben percibir los trabajadores de la educación", afirmó.
Romero precisó que "el índice de pobreza medido por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) ascendió este mes a 43.373,01 pesos, por lo que es obligación del ámbito paritario la urgente salida de esa estadística, ya que detrás de los números hay docentes".
Por último, Romero solicitó la puesta en funcionamiento de las comisiones acordadas para avanzar sobre "las problemáticas educativas, pero en especial el gremio reclama la conformación de lo que denomina 'derechos previsionales' para garantizar y sostener el régimen especial histórico propio", concluyó el sindicalista en el documento de prensa.
(Télam)