Los Programas de Reconversión Industrial (PRI), dirigidos a implementar cambios en los procesos y operaciones para minimizar el impacto ambiental, pasarán a ser implementados por la Dirección Nacional por la Dirección Nacional de Evaluación Ambiental, según lo dispuso la Resolución 17/2022 publicada hoy en el Boletín Oficial.
Los PRI, de carácter voluntario, se encuentran dirigidos a establecimientos industriales y de servicios.
Estos tienen como objetivo promover la mejora de su desempeño y gestión ambiental, instrumentando cambios en los procesos y operaciones con el fin de disminuir los impactos ambientales negativos.
La iniciativa, encolumnada con los Objetivos del Desarrollo Sostenible de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), busca vincular el sector público y el privado para encontrar soluciones a la problemática ambiental.
Para implementarlo, las autoridades locales, la empresa, y la autoridad nacional firman convenios donde se establece el compromiso de las empresas para cumplir determinados objetivos ambientales con un cronograma de implementación, indicadores y plan de seguimiento de los avances.
Entre otros puntos, se busca reducir y optimizar el uso del agua, la energía y los residuos; y disminuir el vertido de sustancias contaminantes en los efluentes líquidos y en las emisiones.
Hasta el momento, los PRI fueron implementados en diversas actividades industriales como ingenios, frigoríficos, industrias de pulpa y papel; establecimientos citrícolas y alimenticias, entre otras.
La Dirección Nacional de Evaluación Ambiental perteneciente a la Secretaría de Cambio Climático, Desarrollo Sostenible e Innovación del Ministerio de Ambiente, asumirá el rol de asistir técnicamente a las empresas en la implementación de las acciones, en la capacitación y provisión de material de capacitación; y en la coordinación de las actividades de supervisión y control del cumplimiento de los compromisos asumidos. (Télam)