La Policía de Noruega prohibió hoy por razones de seguridad una manifestación convocada para mañana en la que estaba prevista la quema de ejemplares del Corán, libro sagrado del Islam, horas después de que el Gobierno de Turquía expresase formalmente su malestar al respecto.
Un vocero policial, Martin Strand, explicó que las autoridades no pueden garantizar la seguridad de la protesta, por lo que confirmó la prohibición de celebrarla a la organización convocante, Sian, que aboga por combatir la "islamización" de Noruega, según la cadena NRK.
El ministro de Asuntos Exteriores turco, Mevlüt Cavusoglu declaró que la manifestación fue cancelada luego de que su cartera convocara al embajador del país nórdico en Ankara.
"Convocamos al embajador noruego tras conocer la concentración planeada para profanar el sagrado Corán. Después de eso, cancelaron el permiso de la acción", declaró el ministro en un acto en Ankara, retransmitido en Twitter.
"Es claramente un delito de odio", alegaron fuentes gubernamentales turcas, citadas por la agencia de noticias Europa Press.
Por su parte, el Gobierno noruego explicó a NRK que el embajador trasladó a sus interlocutores turcos que la concentración de mañana no cuenta con ningún respaldo institucional, pero al mismo tiempo defendió que la libertad de expresión está consagrada en la Constitución.
La Fiscalía General de Ankara abrió antes una investigación sobre incidentes de profanación del Corán por activistas de extrema derecha en Suecia y Dinamarca.
El pasado 21 de enero, el ultraderechista danés Rasmus Paludan, líder del partido antiislam y antiinmigrantes Línea Dura, quemó un Corán frente a la embajada de Turquía en Estocolmo.
Las autoridades turcas calificaron el acto como "crimen de odio" y "otra prueba más del alarmante nivel de islamofobia, racismo y discriminación en Europa". La misión diplomática rusa también condenó ese acto.
Dos días después, el líder del movimiento xenófobo alemán Pegida (Patriotas Europeos contra la Islamización de Occidente), Edwin Wagensveld, quemó varias páginas del libro sagrado en La Haya.
Luego, el 27 de enero, se informó que Paludan quemó un ejemplar del Corán frente a una mezquita en Copenhague, mientras los policías daneses bloquearon el tráfico en la calle y aplicaron medidas de seguridad alrededor del lugar.
Varios medios comunicaron entonces que Paludan tenía intención de llevar a cabo una acción similar cerca de la embajada de Turquía en Copenhague, que se encuentra a unos 100 metros de la sección consular de la misión diplomática rusa.
Esta semana, la Policía de Finlandia confirmó que impidió que en una protesta contra la adhesión del país nórdico a la OTAN se quemara un ejemplar del Corán, un gesto que sí se produjo en la vecina Suecia y provocó el enojo de Turquía, de quien dependen ambas naciones para ingresar a la Alianza Atlántica.
La quema de ejemplares del Corán en Suecia derivó en un estancamiento de las ya de por sí complicadas negociaciones entre Estocolmo y Ankara para que este último dé luz verde a la membresía sueca en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). (Télam)