(Por Camil Straschnoy, enviado especial).- Ucrania pedirá en el G20 un mayor apoyo para aislar diplomática y económicamente a Rusia y convertirla "en la nueva Corea del Norte", sobre todo porque "hay países del grupo que lo ayudan a superar las sanciones al abrirle nuevos mercados", adelantó en una entrevista con Télam la diputada ucraniana Kira Rudik.
La legisladora, parte de la delegación que fue invitada a la cumbre que se realizará mañana y el miércoles en Bali (Indonesia), anticipó que el presidente Volodimir Zelenski pedirá a los gobiernos "abandonar la neutralidad" ante la guerra, cuando hable por videoconferencia ante los líderes de las economías más importantes del mundo.
"El presidente pedirá abandonar la neutralidad, porque cuando hay una lucha entre la guerra y la paz, entre el bien y el mal, no se puede decir que uno no tiene nada que ver con la situación. Y pedirá más respaldo: todavía necesitamos armas y apoyo diplomático en las Naciones Unidas y otras organizaciones", manifestó.
"Hay que ser claros, hay países del G20 que son los que ayudan a Rusia a superar las sanciones porque le abren nuevos mercados", explicó en un mensaje que pareció estar dirigido especialmente a China e India, que se convirtieron en principales compradores del gas que antes de la invasión se dirigía a Europa.
"La guerra es en última instancia sobre el dinero, ser capaces de comprar balas y pagar los soldados y la forma más rápida de detenerla es llevar al país a la quiebra a través del aislamiento económico", añadió la parlamentaria que promueve la inclusión de Ucrania a la Unión Europea (UE) y a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
En ese sentido, se refirió a la ausencia del líder ruso, Vladimir Putin, que no viajará a Indonesia por cuestiones de "agenda", según lo indicó el Kremlin, por lo que la delegación estará encabezada por el ministro de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov.
"Rusia rompió tantas leyes internacionales que ahora mismo la participación en estos encuentros internacionales sería más bien una farsa", apuntó Rudik y manifestó su deseo de que "en algún momento se convierta al país en la nueva Corea del Norte en términos de aislamiento".
Por otro lado, la parlamentaria explicó que Ucrania buscará que el G20 "reconozca que la agresión rusa tiene un impacto en la seguridad alimentaria" del mundo y, por lo tanto, ofrezca garantías para la extensión del acuerdo que permitió reanudar la exportación de granos ucranianos y que vence el 19 de septiembre próximo.
"Su continuidad no es algo que solamente busca Ucrania, sino que el mundo necesita recibir esos granos. Sería absolutamente doloroso que esos granos tengan que pudrirse en los silos", comentó.
La legisladora, líder del partido liberal Holos (Voz, en ucraniano), citó datos del Banco Mundial para estimar que la guerra en su país afectó la seguridad alimentaria de 345 millones de personas, además de tener un impacto en el precio de los granos que aumentaron un 30%.
"Esto, por supuesto, afecta a los países más pobres, que son los que necesitan un mayor apoyo de la comunidad internacional para garantizar el suministro de alimentos", concluyó. (Télam)