Las imágenes del Señor y la Virgen del Milagro recorrían esta tarde las calles de la ciudad de Salta, en una multitudinaria procesión en un jornada soleada y templada, con lo cual la celebración retomaba su normalidad luego de dos años en los que la pandemia de coronavirus obligó a modificar esta popular celebración de la Iglesia Católica.
A las 15.15 salió la Cruz Procesional de la Catedral Basílica Mayor de Salta, y quince minutos después hizo lo propio la imagen de la Virgen de las Lágrimas, con su base de claveles rosados.
Luego, a las 15.45 partió en procesión la Virgen del Milagro, sobre una nube de claveles blancos, y fue recibida por una plaza 9 de Julio colmada de fieles, que esperaron pacientes su salida y la saludaron con agitados pañuelos blancos.
La última imagen en salir, a las 16.30, fue la del Señor del Milagro, acompañada por el arzobispo de Salta, Mario Cargnello; el gobernador Gustavo Sáenz, y otras autoridades eclesiásticas y gubernamentales.
Con su base de claveles rojos, la imponente imagen de tamaño natural y que llegó a Salta en septiembre de 1592, enviada por Fray Francisco de Victoria desde Europa, también fue recibida por una marea de pañuelos blancos y ahora encabeza la multitudinaria procesión.
De esta manera, esta tradicional fiesta, que hoy cumple 330 años de historia desde que los temblores que afectaron al actual territorio de la provincia de Salta cesaron con la salida del templo del Cristo Crucificado, en 1692, vuelve a la normalidad, ya que los últimos dos años sufrió modificaciones por las restricciones dispuestas por la pandemia de coronavirus.
En 2020, la procesión no se realizó, y el año pasado se hizo, pero sin el seguimiento de fieles, que debieron seguir el paso de las imágenes de manera virtual o desde las veredas, con aforo, para evitar la propagación de contagios de la enfermedad.
Las imágenes recorrerán 15 cuadras para llegar hasta el parque 20 de Febrero, donde Cargnello encabezará la ceremonia de Renovación del Pacto de Fidelidad, tras lo que regresarán a la Catedral, donde serán despedidas con campanadas, pétalos de flores y pañuelos en alto y dar lugar así a la Misa del Peregrino, con lo que cerrará la festividad.
Hasta ayer llegaron a la Catedral de Salta, para el encuentro con las imágenes del Milagro, cerca de 100 mil peregrinos de distintos puntos del territorio salteño y de otras provincias, en bicicleta, a caballo y fundamentalmente a pie, en emocionantes demostraciones de fe y devoción.
Para esta tarde se espera la participación de unos 800 mil fieles en la procesión. (Télam)