Acumar avanza con su plan de reactivación integral de la cuenca Matanza- Riachuelo

La Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar), presidida por Martín Sabbatella, continúa con su nutrida agenda de trabajo para la reactivación integral de la cuenca y su integración a los espacios urbanos.

Quizás uno de los proyectos más ambiciosos sea el de promover el turismo sostenible en la cuenca que recorre unos 70 kilómetros a lo largo de la Ciudad de Buenos Aires y 14 municipios bonaerenses.

En noviembre del año pasado, Acumar firmó un convenio con el Ministerio de Turismo de la Nación para que los vecinos puedan disfrutar de circuitos recreativos o de turismo que recorran los principales atractivos ubicados a la vera del río o en sus alrededores.



En tanto, diferentes ONGs y funcionarios estatales trabajan con el foco puesto en reactivar la navegación del río. “En esta gestión de Acumar no recibimos ningún pedido formal, hasta el momento, que nos solicite la navegabilidad en el Riachuelo. De recibirlo tenemos que evaluarlo y realizar la evaluación técnica de acuerdo a la solicitud”, dijo en diálogo con LA NACION Antolín Magallanes, director general de Gestión Política y Social del ente.

El mayor contaminante de esas aguas son los líquidos cloacales, ya que en la cuenca viven 5 millones de personas y la mitad no tiene cloacas, lo que se revertirá cuando esté terminado el Sistema Riachuelo, que construye AySA.



Desde el organismo comandado por Sabbatella buscan recomponer la biodiversidad , mejorar las condiciones del suelo y el agua, y comenzar a plantar la flora nativa para mejorar el paisaje.

Cabe recordar que la cuenca Matanza-Riachuelo, con una superficie total de 2.200 kilómetros cuadrados, 60 de largo y 35 de ancho, comprende a la Ciudad de Buenos Aires y 14 municipios bonaerenses: Almirante Brown, Avellaneda, Cañuelas, Esteban Echeverría, Ezeiza, La Matanza, Lanús, Las Heras, Lomas de Zamora, Marcos Paz, Merlo, Morón, Presidente Juan Domingo Perón y San Vicente.



Una buena noticia para el medio ambiente

La Cooperativa Aceitera La Matanza se convirtió este viernes en la primera empresa recuperada del conurbano en obtener la declaración de adecuación ambiental por parte de la Acumar, lo que significa que dejó de ser considerada un agente contaminante.

La aceitera, ubicada en La Tablada, emplea a más de 90 trabajadores, es una de las principales proveedoras de Molinos Cañuelas y hasta tiene su propia línea de aceite que comercializa en el interior del país.

La Acumar había declarado a la empresa como agente contaminante en el año 2010, cuando todavía era propiedad de Agroindustrias Madero SA. Ya en 2019, con la llegada de la gestión de Sabbatella a la gestión los cooperativistas iniciaron un plan de adecuación que tuvo casi cuatro años de pruebas ambientales, de capacitaciones y refacciones.

Por eso hoy, a través de la disposición 125 de Acumar se dio por “cumplido el Plan de Adecuación presentado por la firma” y se ordenó que se excluya del registro de Agentes Contaminantes al establecimiento”.