En la última sesión de la Cámara de Diputados bonaerense se generó una polémica entre JxC y FDT en torno a la decisión de la Provincia de volver a las clases presenciales en el AMBA y no así en los distritos del interior que están en fase 2 y que siguen con clases virtuales.

En ese sentido, el vicepresidente de la Cámara, Carlos “Cuto” Moreno (Frente de Todos), explicó cómo funciona el sistema de fases en la provincia y leyó detenidamente los datos sobre la vuelta a clases presenciales en los 40 distritos del AMBA y en otros 21 del interior.

“Primero, la presencialidad o no está pedida por los intendentes en un sistema de fases que se coordina con la Jefatura de Gabinete. En la fase 3 y 4 al día hay 61 distritos con presencialidad”, precisó Moreno.

En ese sentido, detalló que eso implica 3,4 millones de alumnos con presencialidad, 10.923 escuelas con presencialidad, 350 mil docentes y auxiliares con presencialidad. Y acotó “con tapaboca, distanciamiento, ingresos escalonados y jornadas de 4 horas mínimo por día”.

El legislador remarcó que “no se puede hablar de presencialidad si no hablamos de criterios médicos”.

Además destacó que la Provincia compró medidores de dióxido de carbono para monitorear cómo está el aire en cada escuela. “El 69% de los docentes y no docentes inscriptos en toda la provincia ya fueron vacunados contra el coronavirus”, acotó.

Moreno disparó contra la oposición al decir que: “Lo único que tendrían que haber hecho es leer el séptimo informe que se presentó ante la bicameral. Lean que los libros no muerden”.

E ironizó: “Que algunos sectores de Cambiemos estén preocupados por la educación es como pensar que Drácula está preocupado por donar sangre”.