NUEVA YK, 17 ENE - Once soldados norteamericanos fueron hospitalizados con síntomas de conmoción cerebral algunos días después del ataque misilístico iraní a la base iraquí de Al-Asad, confirmó el capitán Bill Urban, vocero del comando central de Estados Unidos, que supervisa las tropas en Medio Oriente.
El Pentágono, tras el ataque, había afirmando que hubo daños a las estructuras pero no a las personas.
"Los síntomas emergieron algunos días después del hecho y fueron tratados con amplia cautela", precisó Urban, consultado por medios de prensa sobre la discrepancia con las primeras informaciones que proporcionó el Pentágono.
Inicialmente fue la coalición contra el Estado Islámico la que declaró en un comunicado que "mientras ningún miembro del servicio estadounidense fue muerto en el ataque iraní del 8 de enero a la base aérea de Al Asad, muchos fueron tratados por síntomas de conmoción cerebral desde la explosión y aún están en fase de evaluación".
El vocero del Pentágono precisó luego que ocho personas fueron trasladadas al Landstuhl Regional Medical Center en Alemania y tres fueron enviadas a Camp Arifjan en Kuwait para "averiguaciones".
"El procedimiento estándar prevé que todo el personal presente en el lugar de una explosión sea sometido a screening por lesiones cerebrales traumáticas y si es el caso se lo somete a un nivel de asistencia más elevado".
"Todos los soldados en las cercanías inmediatas de la explosión fueron visitados y evaluados según el procedimiento estándar, según el Departamento de Defensa.
Si se los considera idóneos para el servicio tras el screening, volverán a Irak", concluyó.
(ANSA).