Gallardo ya piensa en los refuerzos

Marcelo Gallardo.

En los tres años de gestión al frente del plantel de River, Marcelo Gallardo tuvo la capacidad para reinventar periódicamente el equipo sin atarse a ningún libreto y, a la vez, sin modificar la estructura base de su estilo futbolístico.

La inminente reinvención -seguramente la última en Núñez porque en diciembre termina su contrato- estará apuntada a potenciar la delantera para ir en busca de otra Libertadores.

El panorama es claro. Con la baja de Mora por problemas de salud y los recurrentes problemas físicos de Alonso (a los 38 años le cuesta cada vez más resistir la alta exigencia) y Larrondo (la lesión crónica en la rodilla derecha no le permite entrenarse ni jugar con intensidad), el funcionamiento ofensivo del equipo depende exclusivamente de la contundente dupla Driussi-Alario. Sin dudas, el técnico necesita un par de delanteros de jerarquía como recambio. Y será la prioridad en este mercado de pases.

El reglamento de la Libertadores permite tres incoporaciones para los octavos y, posteriormente, otros tres más en la previa de las semifinales. De todos modos, el objetivo, y la urgencia, es conseguir los tres refuerzos antes de la primera semana de julio, ya que el 4, 5 ó 6 River jugará la ida de los octavos y tiene tiempo hasta 48 horas antes (o 24 con pago de una multa) para realizar los cambios en la lista inicial de 30 futbolistas.

Seguramente, el cupo que libere Arturo Mina (es casi un hecho que partirá) se usará para un punta. No hay mucho tiempo pero la meta está.