A 12 dias del balotaje en Brasil, Bolsonaro vuelve a cuestionar las urnas electronicas

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, volvió a cuestionar hoy, a 12 días del balotaje presidencial, la confiabilidad del sistema de votación electrónica, argumentando que los equipos "no son auditables", en contra de las garantías brindadas por la justicia electoral y los observadores internacionales.
“La Policía Federal dice que las urnas (electrónicas) no son auditadles. No hay un sistema electrónico que esté perfectamente blindado. Si nunca hubo, llegará el momento. Lo que buscamos siempre es agregar otra capa de transparencia”, dijo el presidente en declaraciones a Radio Tupi, luego de ser consultado sobre si las urnas eran confiables.
“En este momento, como las Fuerzas Armadas fueron invitadas a integrar una comisión de transparencia electoral, ese trabajo le corresponde a las Fuerzas Armadas (...) todos son unánimes en decir que no hay un sistema impenetrable, sistema inviolable”, agregó.
Además, afirmó que el Tribunal Superior Electoral (TSE) "tiene una urna muy anticuada, vieja, de generación de finales de los años 90”.
Si bien la máquina de votación electrónica se lanzó en 1996, contrariamente a lo que afirmó el presidente, la tecnología se ha ido actualizando desde entonces.
En las elecciones de este año, hay más de 577 mil máquinas de votación en uso, de las cuales el 39% son del modelo 2020.
Además de esta versión de los dispositivos, la Justicia Electoral también utiliza los modelos 2009, 2010, 2011, 2013 y 2015. Los más antiguos, de 2009, representan el 13% del total de equipos en uso, según datos recogidos por el diario Folha de Sao Pablo.
Todas las versiones utilizan los mismos programas, desarrollados por la Secretaría de Informática del TSE y mejorados.
Las urnas electrónicas se usan en Brasil sin problemas desde 1996, pero Bolsonaro las cuestiona y defiende que se aplique el voto impreso; e incluso llegó a amenazar el año pasado con la no celebración de elecciones de este año si Congreso Nacional no aprobaba el cambio en el sistema.
En 2021, el presidente fue investigado por el Tribunal Supremo Federal por difundir noticias falsas para atacar el actual sistema de voto con urnas electrónicas e intentar así denunciar fraude en las elecciones de 2022 en caso de derrota.
Las elecciones del 2 de octubre contaron con la presencia de 120 observadores internacionales, además de unos 300 observadores nacionales independientes.
El jefe de la misión de observación electoral de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el excanciller paraguayo Rubén Ramírez Lezcano, afirmó que los comicios generales fueron “absolutamente” normales.
Además, la misión contó con especialistas de la Unión Interamericana de Organismos Electorales (Uniore), el Parlamento del Mercosur (Parlasur), la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa y el Centro Carter, de Estados Unidos.
Hubo dos “misiones técnicas de acompañamiento” a cargo de la Fundación Internacional para Sistemas Electorales (IFES) y la Red Mundial de Justicia Electoral (RMJE).
Otras 80 personas, entre expertos, exgobernantes y autoridades electorales, fueron igualmente invitadas.
Las elecciones “son limpias, seguras y transparentes”, dijo por su parte el presidente del TSE, Alexandre de Moraes, en un acto con los observadores internacionales en la semana previa a la elección.
Bolsonaro solicitó para los comicios de octubre una suerte de auditoría paralela a cargo de las Fuerzas Armadas, sin dar detalles de cómo se realizaría.
Sin embargo, medios locales como diario O Globo, CNN Brasil y Folha destacaron que los resultados de la misma fueron presentados la semana pasada al mandatario sin darlos a conocer al público en general.
Bolsonaro sigue detrás de Luiz Inácio Lula da Silva en la segunda vuelta del 30 de octubre, según las encuestas. Un sondeo de Datafolha, divulgado el viernes, mostró que el candidato del Partido de los Trabajadores (PT) sigue siendo el líder con el 49% del total de intenciones de voto, frente al 44% del jefe del Ejecutivo.
En la primera vuelta, el 2 de octubre, Lula obtuvo el 48,4% de los votos válidos y Bolsonaro el 43,2%. (Télam)