Bajo un cielo nublado, que luego fue el escenario propicio para una de sus anécdotas, la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner acompañó a Mayra Mendoza, la actual intendenta de Quilmes, en su puesta en funciones.

En el mismo, además de compartirlo con la ciudadanía y otros referentes de la política, la titular del Senado nacional afirmó que “la sociedad tuvo más convicciones que muchos dirigentes” de la política argentina.

Además, señaló que se encontraba “emocionada” y “contenta” por el nuevo ciclo de la comuna, y afirmó que “ésta construcción no es magia”. Y luego, fue interrumpida por la tormenta que se acercaba.

“Es de buen augurio la tormenta y la lluvia. El 9 de mayo de 1975, cuando me casé con Kirchner, diluviaba. Había una tormenta que parecía que se caía el mundo. Es una buena señal”, sostuvo la vicepresidenta, generando una ovación entre los presentes.

Luego, la titular del Senado se refirió a su cierre de mandato, el 9 de diciembre de 2015. “Fueron cuatro años duros desde ese día en que nos hicieron terminar el mandato a las 0 horas porque nos decían que era el mandato constitucional”, dijo CFK, que agregó que lo sucedido en el traspaso con Macri en diciembre de 2019, “muestra cuánto le mintieron a la gente quienes repitieron durante todo este tiempo que yo no le quería dar el bastón y la banda”.

“Nunca inventamos nada. Nunca se nos ocurre decir cosas por decir”, dijo la ex presidenta de la Nación, en alusión a su traspaso presidencial.

Finalmente, se refirió al canto “vamos a volver”, que luego se convirtió en una de las consignas de la campaña de Alberto Fernández presidente.

Al respecto, señaló: “Se convirtió en un código de identificación. Identificaba a los que querían volver a un país con derechos y a una sociedad donde comer no sea un privilegio, no a la vuelta de un partido político”.

“Muchos dirigentes nos decían que había que cambiar la consigna. Estos que se la pasan estudiando todo y nunca resuelven nada. Entonces me ponía nerviosa cada vez que en un acto empezaba el “Vamos a volver”. No había un lugar en dónde no lo cantara. Entonces uno se termina convenciendo de que puede ser una construcción marquetinera”, contó CFK a los presentes.

“Vamos a volver a ser lo que fuimos, con aciertos y con errores, durante 12 años y medio", cerró su alocución la vicepresidenta.