Se cumplen 14 años de la muerte de Romina Yan: un legado imborrable

El 28 de septiembre de 2010, la repentina muerte de Romina Yan, de 36 años, enlutó al espectáculo argentino. Catorce años después, su recuerdo se mantiene vivo no solo en los homenajes que sus seguidores le rinden cada año, sino también en la memoria de su familia y sus tres hijos: Franco, Valentín y Azul.

Romina, hija de la renombrada productora Cris Morena y el productor Gustavo Yankelevich, comenzó su carrera artística a una edad temprana. Su primera aparición en televisión fue en el programa "Jugate Conmigo", de su madre, y rápidamente se convirtió en un ícono gracias a su papel en "Chiquititas", donde personificó a Belén, la directora del hogar que se convirtió en un referente para los niños. El programa no solo cosechó éxitos en Argentina, sino que también logró reconocimiento internacional.

A lo largo de su vida, Romina combinó su pasión por la actuación con su rol como madre. En 1998, se casó con el productor Darío Giordano, y juntos tuvieron tres hijos.

Un dolor inquebrantable

El 28 de septiembre de 2010, la actriz se sintió mal tras una rutina de ejercicios y, a pesar de ser trasladada al hospital, no se pudo hacer nada para salvarla. La autopsia reveló que la causa de su muerte fue un aneurisma. 

“Romina hoy es nuestro ángel, nuestra guía y sostén. La sentimos en nuestros corazones”, escribieron Gustavo y Cris en una emotiva carta años después de su muerte. 

Valentín, Azul y Franco, los hijos de Romina Yan