Arte y tecnologia en el CCK: una suerte de mapa plural de la sensibilidad tecnopoetica local

El Fondo Nacional de las Artes (FNA) inaugurará el jueves en el CCK la muestra de su concurso de arte y tecnología, una suerte de mapa plural de la sensibilidad tecnopoética local, a través de un conjunto de proyectos artísticos que aplican nuevas tecnologías en su producción.
Se trata de 24 obras que dan cuenta de los múltiples modos de expresión del arte tecnológico, lo que incluye a las tres ganadoras, seis menciones honoríficas y 15 piezas seleccionadas en este certamen de perspectiva federal y de paridad de género.
El Primer Premio, "Fono Raggy", del rosarino Federico Agustín Gloriani es un aparato de reminiscencia obsoleta, que a partir de una versión digitalizada de la pintura "Rincón de Estudio" (1946), de Fortunato Lacámera, toma la información de color de pixeles y los imprime en un soporte físico.
La obra que obtuvo el segundo premio, "Espero recordarlo todo", de Ivana Laura Nebuloni, oriunda de Morón, invita al espectador a sentarse y contar una historia personal a un micrófono, relacionado con el pasado propio, para visualizar luego, en una pantalla de cine, material en VHS vinculado a ese relato pero también a la infancia de la artista.
Concebida en y para el monte chaqueño, la pieza "Ostrananie", de Cecilia Lis García y Eduardo Bustamante, de Resistencia, obtuvo el Tercer Premio: una instalación que propone un espacio de extrañamiento a partir de la amplificación de lo sensorial.
Así, se verán trabajos variados que, en su mayoría, demandan la interacción del espectador, por ejemplo: una ticketera que arroja un papel que imprime (en vez de un número de espera) un fragmento literario; o un hongo preservado dentro de un robot, programado para moverse hacia espacios que reúnan las mejores condiciones ambientales, una suerte de máquina como anticipo a un posible cataclismo ecológico.
En otra pieza, el visitante deberá contestar una serie de preguntas y al finalizar la encuesta, la máquina "revelará" la orientación política de la persona, una suerte de Turing basado en textos políticos que otorga un "Certificado de ideología", según se lee en la obra.
“En esta selección no sólo se encuentran presentes las más diversas disciplinas artísticas sino que las vemos entrelazadas conformando híbridos sumamente interesantes y contemporáneos", dijo a Télam Raúl Labacanne, uno de los integrantes del jurado junto a Alejandro Schianchi y Mariela Yeregui.
- Télam: ¿Dirían que en su conjunto, estas obras reflexionan sobre el futuro, el pasado o el presente?
- Raúl Labacanne: Las obras de arte siempre responden al tiempo y espacio de producción de las mismas. En cuanto a su relación con el tiempo yo suscribo a la idea del triple presente de San Agustín: el tiempo no es una cosa, sólo la puedo experimentar y por lo tanto sólo puedo dar cuenta de ella en el lenguaje. Y el lenguaje siempre lo pongo en juego en tiempo presente, por lo tanto el pasado aparece como una reposición en presente y el futuro como una proposición del presente. No tengo dudas que la selección que realizamos de estas obras, van a hacernos entrar en diálogo con tiempos presentes, pasados y futuros.
- Alejandro Schianchi: Me parece interesante la pregunta porque hay una idea general de que lo tecnológico o el cruce de arte y tecnología tiene que ver en general con un futuro, que no sabemos si ya pasó o no. Pero curiosamente los tres primeros premios tienen bastante que ver con una lectura del pasado, desde el presente con tecnología que en algunos casos es de otra época -si se quiere, obsoleta- pero combinada con otras actuales, y que de alguna manera dan cuenta de un futuro en el que empiezan a convivir distintos tipos de tecnología. Destaco además la relación de la tecnología con tradiciones culturales diversas porque muchas veces un proyecto integral y artístico termina siendo más interesante cuando se conecta con algo del pasado para releer, desde ahí, el presente, e incluso el futuro.
. T: ¿Creen que en este conjunto de obras los artistas priorizan el uso de la tecnología o la utilizan, al servicio de una narrativa?
- AS: Intentamos enfatizar los proyectos que no usan tecnología porque sí, sino por una poética tecnológica, que puede ser de carácter sensible, emocional, conceptual, intelectual, política, ideológica y muchos más. Desde ya que muchos de los proyectos tienen que ver con últimas tecnologías como RV o Realidad Aumentada, con redes sociales o con Internet. Enfatizamos el uso de lo tecnológico, no diría en función de una narrativa, sino al servicio de una poética.
- RL: Es interesante tu pregunta porque los motivos de uso y las funciones que cumple la tecnología en las obras que escogimos, evidentemente resultan ser muy diversos. Ahora, esa diversidad en tanto a la dimensión tecnológica no es distinta a la que ocurre en monodisciplinas artísticas. Dependiendo de la obra puede responder a una cuestión temática, a una técnica de representación específica, a un avance del complejo Ciencia y Tecnología, a un emergente técnico-social, etcétera. Pero siempre implica una reflexión sensible sobre el conjunto de signos de orden tecnológico que circula en una sociedad.
La muestra podrá visitarse hasta el 8 de diciembre, de miércoles a domingos y feriados, de 13 a 20, en el CCK, con entrada gratuita. (Télam)