Productores de trigo optan por semillas de ciclo corto por humedad en el centro y norte de Santa Fe

Los productores de trigo del centro y norte de la provincia de Santa Fe comenzaron a utilizar en mayor medida semillas de ciclo intermedio o corto, reemplazando las de ciclo largo, en razón de los excesos de humedad observados, aunque ello no modifica las previsiones de llegar a las 375.000 hectáreas destinadas a ese cultivo.
De acuerdo con el informe semanal que elaboran el Ministerio de la Producción de la provincia y la Bolsa de Comercio de Santa Fe, "el sector productivo comenzó a cambiar semillas de ciclo largo por variedades de ciclo intermedio y/o corto, como consecuencia de las condiciones climáticas que reinaron desde el inicio de la siembra".
En ese sentido, voceros del sector explicaron ante una consulta de Télam que "pasar a semillas de ciclo medio o corto es aconsejable dadas las condiciones climáticas y los excesos de humedad de las últimas campañas, ya que hacerlo permite lograr mayor potencialidad".
El informe señala que ese pase al ciclo corto "revirtió una situación, ya que durante años las variedades de ciclo largo fueron las que se sembraron en mayor proporción".
"Esta particularidad en la siembra no impactó en el ánimo del sector productivo y continuó sostenida la intención de siembra, que se estimó en unas 375.000 hectáreas, con un incremento del orden del 4,5 a 5% sobre el área sembrada en el período anterior", añade el trabajo.
Sobre la soja tardía o de segunda, esta semana el proceso de cosecha llegó al 75% de la superficie, lo que representa unas 376.870 hectáreas, con un adelanto de 19 puntos intersemanal y un retraso de 10 puntos en comparación con la campaña pasada.
Los cultivares se encuentran en un 50% en estado bueno, con sectores o áreas muy buenas y lotes puntuales excelentes; un 25% en estado regular y el restante 25% en estado regular a malo, con impactos y consecuencias directas por los eventos climáticos sufridos.
Los rendimientos promedios en el sur del área de estudio fluctuaron entre 28 y 44 quintales por cada hectárea, en tanto en el centro oscilaron entre los 14 y 42 quintales, y en el norte entre 8 y 28 quintales.
En lo referente al algodón, la semana pasada presentó cambios en la situación ambiental, permitiendo lentamente el ingreso a los lotes para la realización de las actividades retrasadas, especialmente cosecha y aplicación de defoliantes. (Télam)