El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, anunció hoy que enviará a la Legislatura bonaerense un proyecto para crear un Régimen Provincial de Fomento de Inversiones Estratégicas a nivel provincial, con el que pretende alentar grandes inversiones y específicamente, la construcción de una planta de gas natural licuado (GNL) en Bahía Blanca, una iniciativa empantanada por lo que definió como “competencia entre jurisdicciones”.

“Estamos ante una de las inversiones más importantes de la historia argentina y, como tal, debe tratarse con seriedad, prudencia y discreción”, afirmó el gobernador, y pidió que “no se intente caer en la politiquería barata”. De todas maneras avisó que seguirá trabajando “con seriedad” en el tema “por más que sigan chicaneando”.

En una conferencia de prensa, el mandatario bonaerense explicó que el presidente de Yacimientos Petrolí­feros Fiscales (YPF), Horacio Marín, realizó consultas al Ejecutivo provincial y que en su respuesta le explicó que para concretar el proyecto hay requisitos que “exceden las atribuciones” de su mando y que dependen de “leyes que debe tratar la Legislatura y decisiones que deben adoptar el municipio de Bahía Blanca y el consorcio de administración del puerto”.

En cuanto al aspecto legislativo, anunció, entonces, que ha resuelto enviar “un proyecto de ley para un Régimen Provincial de Fomento de Inversiones Estratégicas vinculadas a grandes inversiones, la producción y el trabajo en la provincia de Buenos Aires”, en el que pretende “englobar requisitos que necesitan las compañías para llevar adelante el proyecto en Bahía Blanca”.

Entre ellos está la “estabilidad tributaria por un periodo similar al que ofrece el régimen nacional”, es decir, el Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) aprobado por el Congreso de la Nación como parte de la Ley Bases, explicó Kicillof.

Este proyecto de RIGI provincial contribuiría a destrabar la concreción de la planta de GNL, “una inversión de 50.000 millones de dólares”, según destacó el mandatario.

“No solo lo hemos manifestado, hemos también demostrado nuestro interés en innumerables comunicaciones y reuniones con todos los actores involucrados, e incluso con un decreto que establece que esta inversión es de interés provincial. Por más que sigan chicaneando, nosotros vamos a seguir trabajando con seriedad porque se trata de un proyecto determinante y estratégico para Bahía Blanca, su puerto y nuestra provincia”, subrayó.