Un robo violento y millonario sacudió la tranquila localidad de Mendiolaza, en la provincia de Córdoba, durante la madrugada del domingo. La víctima, el ex embajador argentino Alejandro Mosquera, de 71 años, y su familia, fueron maniatados y encerrados mientras los delincuentes se llevaban un cuantioso botín.

Un asalto con lujo de detalles

Al menos tres ladrones, vestidos de negro, con pasamontañas y guantes, ingresaron a la vivienda de Mosquera alrededor de la 1 de la madrugada. Según el relato de la víctima a la Policía de Córdoba, los delincuentes redujeron a él, su esposa y su hija, atándolos con cordones de calzado y encerrándolos en una habitación mientras ejecutaban el robo.

En cuestión de minutos, los asaltantes lograron hacerse con una impresionante cantidad de objetos de valor. Entre el botín se encontraban dos televisores Phillips de 32 y 50 pulgadas, ocho relojes de lujo de marcas como Rolex, Cartier y Omega, 4.000 dólares y 2.000 euros en efectivo, dos iPhone, joyas, documentación y tarjetas de crédito. Además, se llevaron seis armas de fuego, incluyendo pistolas, un revólver, una escopeta y un rifle con mira telescópica, junto con varios cuchillos de caza y municiones.

El vehículo familiar, un Toyota Corolla Cross, también fue sustraído por los ladrones y utilizado para la fuga. Horas más tarde, el auto fue encontrado abandonado en Villa Serrana, a unos 10 kilómetros de la escena del crimen, lo que sugiere que fue utilizado solo para facilitar la huida.

La vida después de la diplomacia

Alejandro Mosquera tuvo una destacada carrera diplomática durante el gobierno de Carlos Menem. Ingresó a la Cancillería en 1990 y ocupó importantes puestos como embajador en Chile, Panamá y Bolivia, destinos clave durante la formación del Mercosur. Actualmente, Mosquera se desempeña como síndico en la empresa estatal de la Lotería de la Provincia de Córdoba.

Un patrón de inseguridad

Este violento asalto no es un hecho aislado en la provincia de Córdoba. En los últimos días se registraron otros robos significativos en la región. En Villa Allende, un suburbio cercano, una pareja fue víctima de un audaz asalto en su residencia de tres plantas, donde los ladrones se llevaron 20.000 dólares, 5 millones de pesos y varias joyas, además de un celular iPhone.

Simultáneamente, continúan los ataques a choferes de aplicaciones en la periferia de la capital cordobesa. Un joven que conducía para la aplicación Didi sufrió el robo de su Volkswagen Gol Trend en el barrio Campo La Rivera, donde fue golpeado por seis delincuentes que le robaron el auto, su teléfono y su billetera. El vehículo fue recuperado posteriormente, aunque con daños.

Impacto psicológico y físico del robo

El robo sufrido por Mosquera y su familia no solo tuvo consecuencias materiales. Experiencias traumáticas como esta pueden dejar secuelas psicológicas profundas, como estrés postraumático, ansiedad y problemas de sueño. Según expertos, vivir un episodio de violencia extrema puede afectar significativamente la salud mental de las víctimas, especialmente cuando se sienten vulnerables en su propio hogar.

La inseguridad en Córdoba ha llevado a un aumento en las medidas de seguridad tomadas por los residentes. Las autoridades locales están trabajando para fortalecer la presencia policial en las zonas más afectadas y proporcionar apoyo a las víctimas de estos delitos.

En este contexto, es crucial que la comunidad mantenga la calma y colabore con las fuerzas de seguridad para prevenir futuros incidentes. La prevención y la respuesta rápida pueden hacer la diferencia en la lucha contra la creciente ola de criminalidad que afecta a la región.

Con un panorama de inseguridad cada vez más preocupante, la ciudadanía espera que las autoridades tomen medidas efectivas para proteger a los residentes y devolverles la tranquilidad que merecen.