Remedios por las nubes: ¿cuáles registraron los mayores aumentos?

En el último año, los precios de los medicamentos han crecido a un ritmo superior al de la inflación, afectando el acceso de los argentinos a productos esenciales para su salud. Según tanto estudios públicos como privados, este incremento ha sido más rápido que el de los ingresos de la mayoría de la población, agravando la situación económica de las familias que necesitan tratamientos médicos.

De acuerdo a los datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), entre julio de 2023 y julio de 2024, el sector salud tuvo un incremento del 285,2%, mientras que la inflación general se ubicó en un 266,1%. Al desglosar esta cifra, el aumento en “productos medicinales, artefactos y equipos para la salud” fue del 289,4%, es decir, 23,3 puntos porcentuales más que el Índice de Precios al Consumidor (IPC).

Desde una de las principales empresas de medicina prepaga se explicó que este fenómeno se ha agudizado desde la pandemia de Covid-19. Antes, los medicamentos representaban el 15% del “gasto médico” en las coberturas de salud, tanto públicas como privadas, pero tras la pandemia, esta cifra subió al 33%.

Motivos detrás de los aumentos

El sector de salud ha identificado varias causas para este incremento desmedido en los medicamentos. Desde una compañía del sector mencionan que "la distorsión inflacionaria" ha permitido que ciertos medicamentos suban más de lo necesario. Además, se señaló que la aprobación de nuevos fármacos, muchas veces sin suficiente evidencia de su efectividad en todos los casos, también ha influido. Otro factor mencionado fue la "industria del juicio", que obliga a las obras sociales y prepagas a cubrir tratamientos costosos, llegando a valores exorbitantes sin pruebas de su utilidad para los pacientes.

Entre enero de 2019 y agosto de 2024, los medicamentos subieron un 4.055%, muy por encima de la inflación acumulada del 3.537%. Comparado con esto, la cuota promedio de una prepaga aumentó un 2.922% en el mismo período, mientras que los salarios apenas crecieron un 2.556% hasta julio de este año, reflejando un marcado desfasaje entre los costos de salud y los ingresos de los trabajadores.

Productos con subas por encima del promedio

Entre los medicamentos que han mostrado los aumentos más pronunciados desde julio de 2023 hasta septiembre de 2024, destacan varios de uso frecuente. Por ejemplo, el Nutrilon Pepti Lata (fórmula láctea con proteínas) tuvo un aumento del 596%, mientras que productos como las tiras reactivas Accu-chek y medicamentos para la diabetes como el Diamicron subieron un 596% y un 544%, respectivamente.

Otros productos esenciales para la circulación, como el Daflon 1000, vieron una suba del 567%, y el Enterogermina, utilizado para la flora intestinal, aumentó un 560%. Estos incrementos superan ampliamente el 316,6% de inflación registrada en el mismo período.

El Centro de Economía Política Argentina (CEPA) también documentó subas importantes en productos como el Ibupirac 600 mg, que pasó de costar $2.014 en julio de 2023 a $11.201 en el mismo mes de 2024, representando un aumento del 456%. Otros ejemplos incluyen el Trastocir (406% de aumento) y la Aspirina (400%).

Impacto tras las elecciones

El informe también señala que, tras el triunfo electoral de Javier Milei, los medicamentos comenzaron un ciclo de aumentos abruptos. En noviembre de 2023, los precios subieron un 25,7%, seguido de alzas del 40,9% en diciembre, y aumentos sostenidos durante los meses posteriores. En un lapso de nueve meses, los medicamentos que suelen utilizar las personas mayores aumentaron un 188,2%, frente a una inflación general del 164,6%.

Aunque los medicamentos con cobertura de PAMI suelen ser más accesibles que los de venta al público, también registraron un incremento acumulado del 254% desde noviembre de 2023.

Altos costos en tratamientos complejos

Los medicamentos de alta complejidad no han sido ajenos a esta tendencia. El Perjeta-Herceptin, utilizado para el tratamiento del cáncer de mama, alcanzó un precio de mercado de $16.500.000, con una suba del 590% en los últimos 14 meses. De manera similar, otros medicamentos como el Glassia y el Mabthera, utilizados para tratar enfisema y artritis reumatoide, subieron hasta un 586%, con precios que rondan los $6.500.000 y $7.000.000.

El OFEV, utilizado para enfermedades pulmonares, alcanzó los $19.000.000 tras un incremento del 473%, mientras que el Adcetris, indicado para linfomas, subió un 515% y cuesta actualmente $13.600.000.