Fentanilo contaminado y una movilización que busca respuestas

El próximo jueves a las 14 horas, familias de víctimas afectadas por el uso de fentanilo contaminado marcharán frente al Hospital Italiano de La Plata. La convocatoria, impulsada por Soledad Francese —madre de Renato Nicolini, uno de los jóvenes fallecidos—, busca respaldar la investigación judicial en curso y exigir respuestas claras a las autoridades del establecimiento, a quienes acusan de haber ocultado información clave.

“Nos enteramos por otro paciente”

El caso de Renato, un joven de 19 años oriundo de Chascomús, expone con crudeza las consecuencias del brote de sepsis causado por ampollas de fentanilo contaminadas con bacterias letales. Tras un accidente en moto, fue internado en el Hospital Italiano y sedado con el fármaco. A los pocos días desarrolló fiebre, neumonía y una inflamación cerebral que requirió una craneotomía. Falleció el 5 de mayo, pero su madre se enteró de la contaminación recién una semana después, y sólo porque insistió en una reunión con la dirección del hospital.

“El hospital sabía del problema desde el 29 de abril, pero no nos avisaron. Tuvimos que enterarnos por el hijo de otro paciente”, denunció Francese. Además, valoró el trabajo judicial en curso: “El juez no se tomó la feria y sigue investigando; nosotros queremos acompañarlo”.

48 muertes, 3 laboratorios y el silencio

El caso de Renato es apenas uno entre decenas. La crisis sanitaria desatada por el fentanilo contaminado dejó hasta el momento 48 víctimas fatales y al menos 70 personas afectadas en centros médicos de Buenos Aires, CABA, Santa Fe y Neuquén. La justicia federal ya investiga a los laboratorios HLB Pharma y Ramallo, donde se hallaron registros adulterados y documentación faltante. También se analiza un posible desvío de materias primas al mercado ilegal: faltan 5 kilos de citrato de fentanilo, suficientes para abastecer cuatro años de consumo clínico.

En el Hospital Italiano de La Plata, el foco estalló en marzo con cuatro muertes en 48 horas. El 15 de abril, la jefa de Microbiología, María Virginia González, detectó en cultivos hospitalarios las bacterias Ralstonia pickettii y Klebsiella pneumoniae, inusuales en ese contexto. El 30 de abril se hallaron esas mismas bacterias en ampollas del fármaco.

“Cadena de negligencias”

Francese no apunta solo contra los laboratorios. Acusa una “cadena de negligencias” que involucra a:

• La ANMAT, por no sancionar a proveedores con antecedentes.
• El hospital, por adquirir medicación de dudoso origen y no informar a las familias.
• Las autoridades sanitarias, por omitir alertas sobre alternativas terapéuticas.

A más de tres meses del estallido, las ampollas contaminadas no fueron destruidas: se mantienen bajo peritaje. El Instituto Malbrán ya confirmó la coincidencia genética entre las bacterias halladas en pacientes y las que estaban en las ampollas.

La marcha y el reclamo

El acto será pacífico, con permiso municipal, corte de calle, encendido de velas y discursos breves. Se espera la participación de otras familias querellantes, como las de Luis Rossetti, Daniel Oviedo y Leonel Ayala. Todas exigen lo mismo: justicia, transparencia y que un caso de esta magnitud no vuelva a quedar en las sombras.