ANSA/ Vaticano: Archivo Secreto cambia de nombre, Apostolico

CIUDAD DEL VATICANO, 28 OCT - El Archivo Secreto Vaticano cambia de nombre y se llamará Archivo Apostólico, quitando una palabra que hoy se considera negativo para utilizar otra más "cercana" al papa Francisco.
En la Carta Apostólica en forma de motu proprio donde da a conocer la decisión, el papa explica precisamente que "con los progresivos cambios semánticos verificados en las lenguas modernas y en las culturas y sensibilidades sociales de diversas naciones, en medida más o menos marcada, el término Secretum unido al Archivo Vaticano empezó a ser malentendido, a ser matizado por matices ambiguos, hasta negativos", respecto de su significado original.
El Archivo en efecto nace de la Biblioteca "secreta" del Romano Pontífice, es decir de los códices y escrituras bajo la jurisdicción directa del papa.
Se llamó primero simplemente "Archivum novum" y luego "Archivum Apostolicum", para pasar finalmente a ser "Archivum Secretum" (los primeros testimonios del término se remontan aproximadamente a 1646).
"El término Secretum, que entró a formar la denominación propia de la institución, prevaleció en los últimos siglos, estaba justificado, porque indicaba que el nuevo Archivo, querido por mi predecesor Paulo V hacia 1610-1612, no era si no el archivo privado, separado, reservado, del papa".
"Así quisieron siempre definirlo todos los pontífices y así lo definen todavía hoy los estudiosos, sin ninguna dificultad.
Esta definición, por otro lado, estaba difundida, con significado análogo, ante las cortes de soberanos y príncipes, cuyos archivos se definieron propiamente secretos", agregó.
En su interior custodia documentos muy raros que llegaban al Vaticano desde todas partes de Europa.
Desde 1881 parte del Archivo está a disposición de los investigadores de todo el mundo y cada año crece el número de textos puestos a disposición para consulta.
Desde el próximo 2 de marzo de 2020, por disposición precisamente de Jorge Bergoglio, la fecha de acceso a los documentos se extenderá hasta el final del pontificado de Pío XII.
"Se decidió -concluyó Francisco- el gradual crecimiento de la estructura del Archivo por su cada vez mayor servicio a la Iglesia y al mundo de la cultura, cumpliendo siempre las enseñanzas y las directivas de los pontífices".
(ANSA).