La Policía Metropolitana (Met) de Londres anunció hoy que entregará folletos con el tipo de lenguaje y comportamientos considerados ilegales en la próxima marcha propalestina programada para mañana en el centro de la ciudad, que se realizará en un contexto de creciente tensión y preocupación por posibles violaciones a la ley, con la advertencia de que no se tolerarán "abusos racistas, ni la promoción del terrorismo".

Esta iniciativa busca proporcionar claridad sobre las expresiones de protesta que podrían infringir la ley.

Además, la policía desplegará más de 1.500 agentes, incluidos 500 procedentes de otras localidades, para manejar la protesta, que se espera atraiga a al menos a 100.000 personas.

La fuerza de seguridad también incorporará oficiales que hablen árabe y abogados para asesorar en tiempo real sobre posibles violaciones.

"La Met apoya el derecho de las personas a protestar legalmente. Sin embargo, no toleraremos abusos racistas, religiosos ni la promoción del terrorismo. Hemos trabajado con los organizadores para asegurar que los participantes entiendan nuestras expectativas”, expresó el subcomisario adjunto Ade Adelekan, quien liderará la operación, en un comunicado.

Además, Adelekan enfatizó que el público "verá más comunicaciones nuestras este fin de semana. Cualquier persona que sea racista o incite al odio debe esperar ser arrestada”.

Informó que se implementarán observadores capacitados a lo largo de la marcha para identificar y actuar frente a actividades delictivas.

También se empleará tecnología avanzada para rastrear a los delincuentes dentro de grandes grupos y se desplegarán equipos de intervención rápida.

“Si ven un comportamiento que haya cruzado la línea de criminalidad, les pedimos que lo informen de inmediato a uno de los muchos oficiales presentes”, subrayó.

El enfoque policial también se extiende a la fase post-evento, con especialistas recopilando y revisando pruebas para identificar conductas delictivas y localizar a los responsables.

La policía trabajará en la dispersión ordenada de los manifestantes al final de la marcha, para evitar grupos separatistas que han causado trastornos en eventos pasados.

“Intervendremos muy pronto, utilizando todos los poderes legales a nuestra disposición, para asegurarnos de que las personas se sientan seguras y estén protegidas”, concluyó Adelekan. (Télam)