¿Fin de las PASO? Gobierno envía proyecto clave al Congreso
El Gobierno busca eliminar las PASO y modificar el financiamiento de los partidos. ¿Qué consecuencias tendría esta reforma para la política argentina?
El presidente Javier Milei ha enviado al Congreso dos proyectos de ley clave para transformar el sistema político argentino. A solo días de finalizar el período de sesiones ordinarias, el Ejecutivo ha convocado a sesiones extraordinarias para tratar la eliminación de las PASO y una reforma integral al régimen de financiamiento de las campañas electorales.
El fin de las PASO: una reforma que divide a la política
El primero de los proyectos propone la eliminación de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), un sistema que, según el Gobierno, ha resultado en un gasto público innecesario. De acuerdo con el oficialismo, esta reforma devolvería a los partidos políticos la “libertad de definir sus mecanismos internos” sin la intervención del Estado, acortando además los plazos electorales.
Sin embargo, la medida ha generado controversia en el seno de la oposición. El PRO y la UCR, habituales aliados del oficialismo, han expresado su rechazo a la eliminación de las PASO, argumentando que este cambio no solo debilitaría la transparencia en la selección de candidatos, sino que también podría concentrar aún más el poder en las cúpulas partidarias. “Las primarias sirven para ampliar la democracia interna de los partidos. Quitarlas sería un retroceso”, advirtieron desde los sectores opositores.
El financiamiento de las campañas: un giro hacia el privado
El segundo proyecto enviado por el Gobierno propone un cambio radical en el financiamiento político. La iniciativa busca reducir drásticamente el aporte público a las campañas electorales y promover el financiamiento privado con mayores controles. De aprobarse, se eliminarían los aportes públicos extraordinarios para campañas y boletas, dejando solo un aporte anual a través del Fondo Partidario Permanente.
Este nuevo sistema distribuiría el financiamiento de manera equitativa: el 20% del fondo se repartiría en partes iguales entre todos los partidos reconocidos, mientras que el 80% restante sería asignado proporcionalmente a los votos obtenidos en la última elección de diputados nacionales, siempre que superen el 1% del padrón electoral.
En cuanto al financiamiento privado, el proyecto establece límites claros para los aportes individuales, permitiendo un máximo de hasta el 35% del monto anual del Fondo Partidario Permanente. Además, los partidos tendrán que adherirse a estrictas medidas de transparencia: todos los aportes deberán ser bancarizados y reportados públicamente en una plataforma digital accesible para todos los ciudadanos.
Los nuevos requisitos para la formación de partidos políticos
Además de la reforma en las PASO y el financiamiento, el Gobierno también propone una serie de modificaciones al régimen de partidos políticos. Entre las principales modificaciones se destaca el aumento de los requisitos de afiliación para la constitución de partidos en distritos con alta densidad poblacional, como la Ciudad de Buenos Aires. Se espera que estos cambios limiten la proliferación de partidos sin un respaldo ciudadano sólido.
Para los partidos nacionales, se elevará el número de distritos requeridos para su reconocimiento, pasando de cinco a diez, y deberán contar con un mínimo del 0,1% de afiliados del padrón nacional.
El costo de las PASO: una carga para el Estado
El Gobierno justifica estas reformas citando el despilfarro de recursos que, según ellos, implican las PASO y el sistema de financiamiento actual. En 2023, el Estado destinó aproximadamente USD 1,3 millones a aportes anuales, más de USD 5 millones para las PASO y más de USD 10 millones para las elecciones generales. "El sistema actual no ha logrado sus objetivos de equidad y ha resultado en un gasto innecesario", asegura el Ejecutivo.
Control y transparencia: una digitalización que llega para quedarse
Entre las medidas más destacadas también se encuentra la digitalización de los procesos de afiliación y renuncia a los partidos políticos. Este cambio tiene como objetivo mejorar la transparencia y evitar el fraude en los registros partidarios. El Gobierno también ha señalado que los partidos deberán cumplir con estrictos controles para garantizar que los fondos recibidos sean legales y transparentes.
A pesar de la resistencia de sectores clave como el PRO y la UCR, el Gobierno mantiene su firme intención de llevar adelante estas reformas. Con la convocatoria a sesiones extraordinarias, se espera que el debate sobre la eliminación de las PASO y el cambio en el financiamiento político se intensifique en los próximos días. Si se aprueban, las reformas marcarán un punto de inflexión en el sistema político argentino.
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