Nahir Galarza rompió el silencio: así son sus días en prisión

Nahir Galarza, condenada a prisión perpetua por el asesinato de su novio Fernando Pastorizzo, volvió a hablar en una nueva entrevista y abrió su corazón. A casi tres años de su condena firme, la joven de 26 años compartió detalles de su vida en la cárcel, sus reflexiones sobre el crimen y su pedido de perdón a los padres de Fernando.

"Les pido perdón desde lo más sincero de mi corazón"

En una entrevista con Canal 9 Litoral de Paraná, Galarza se dirigió directamente a los padres de la víctima, con quienes intentó contactar en varias ocasiones. "Mis padres y yo intentamos contactarnos con los padres de Fernando, pero ellos no quisieron. Es entendible que no quisieran nada conmigo. Les pediría perdón desde lo más sincero de mi corazón. Me puse en su lugar en toda la situación, no sé si ellos lo hicieron, pero eso me deja tranquila", expresó con voz firme.

¿Un futuro de revisión de la condena?

A pesar de que la Corte Suprema dejó firme su condena en julio del año pasado, Galarza aseguró que no apelará la sentencia ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos. No obstante, la joven está evaluando la posibilidad de solicitar la revisión de su condena en los próximos años, con la esperanza de demostrar su arrepentimiento genuino. "Todos los días intento ser mejor. Estudio idiomas, voy a la iglesia. Vamos a ir por ese lado, de poder demostrar que sí realmente tengo un cambio y que quiero progresar", expresó.

La vida en la cárcel: estudio, trabajo y religión

Sobre su día a día en la prisión, Galarza contó cómo ha adaptado su vida en el penal. "Estoy estudiando idiomas y la carrera de psicología social a distancia. También trabajo en el taller de costura. Los fines de semana voy a la iglesia, a yoga y hago todo lo que esté a mi alcance", comentó. Además, remarcó que las visitas son muy limitadas, ya que solo puede recibir visitas de sus padres cada 15 días.

"Nunca tuve el beneficio de la duda"

En otro tramo de la entrevista, Galarza tocó la sensibilidad de la relación con su padre y las versiones que circularon sobre su implicancia en el crimen. "Se inventaron muchas cosas, yo no hice ninguna denuncia ni pedí ninguna restricción contra mi padre. Yo soy responsable, yo estoy condenada. A él no se lo investigó", sentenció, defendiendo su postura frente a las versiones de que su padre hubiera tenido algo que ver en el caso.

Reflexiones sobre la cárcel: "Me ayudó a encontrarme conmigo misma"

Con la mirada puesta en los años de reclusión, Galarza reflexionó sobre cómo la cárcel la ha cambiado profundamente. "En algún momento me quitó las ganas de vivir, la esperanza de salir y ser una persona normal. Pero me dio mucho aprendizaje. Estoy muy agradecida por la reflexión de estos años porque me ayudó a encontrarme conmigo misma, y sentirme libre de expresar lo que siento", concluyó la joven, quien se mostró decidida a seguir con su proceso de cambio.