¿Cómo será la reforma del Sistema Penitenciario que impulsa Vidal?

El ejecutivo bonaerense apunta a una reforma integral que permita realizar mejoras edilicias, construir nuevas dependencias y generar mejores sistemas de reinseción social para los reclusos

Argentina24 de agosto de 2016 Redaccion GLP
Gustavo Ferrari Gustavo Ferrari

En el marco del Plan integral de seguridad, la gobernadora María Eugenia Vidal impulsa la reforma del Sistema Penitenciario denominado "Plan Estratégico 2016-2026", que presenta colapso por sobrepoblación y graves problemas edilicios.  En total son 35.000 personas privadas de su libertad, cuando el sistema de cárceles solo cuenta con 26.000 plazas para albergar presos.

Según el ministro de Justicia, Gustavo Ferrari, "Las primeras medidas, apuntan a solucionar cuestiones humanas de la situación de los detenidos y las vamos a cumplir en estos cuatro años" sintetizó. Se trata de un plan que aseguró además se planea "para 10 años y trascenderá el gobierno de Vidal".

La gobernación planea la reforma haciendo hincapié en dos lineas fuertes de trabajo: la mejora de las condiciones de habitabilidad y reinserción social, y por otra parte el fortalecimiento del Servicio Penitenciario. Así buscarán primero readecuar las 55 unidades penitenciarias, que datan de principios de siglo pasado, como primer paso.

Luego planean construir dos nuevas cárceles que se levantarán en el año próximo. Según Ferrari: “No se construye una cárcel con capacidad para 1500 personas, desde el año 2001. Además, estamos trabajando con la agencia de bienes del Estado, con ferrocarriles y con el Ministerio de Defensa para identificar establecimientos que puedan ser destinados a cárceles de mediana o mínima seguridad" remarcó.

El Ministerio admitió que, actualmente, hay 2.310 presos alojados en comisarías, desobedeciendo los llamados de atención de la Corte Suprema de Justicia que solicita que no alojar detenidos en dependencias policiales.

Además de la cuestión edilicia, la reinsersión de los reclusos a la sociedad también es una deuda, reconocen desde el ministerio. “Casi no hay trabajo en las cárceles, y los sistemas de provisión de educación tienen carencias notables”, admitió Ferrari. No obstante un 40% de la población carcelaria  realiza cursos en algún nivel educativo, a pesar de la falta de espacios y las dificultades del sistema para enfrentar la creciente demanda.
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