El triunfo de LLA en CABA reordena el tablero en Provincia y tensa la negociación con el PRO

La sorpresiva victoria de La Libertad Avanza (LLA) en las elecciones legislativas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires detonó una reconfiguración profunda en el mapa político de la oposición. El golpe fue directo al corazón del PRO, que no sólo perdió en su bastión histórico, sino que quedó relegado ante un nuevo actor dominante en la derecha argentina: el mileismo.

Con Manuel Adorni como el candidato más votado en CABA y el respaldo explícito de Karina Milei y Javier Milei a la conquista del distrito, la tropa libertaria celebró con euforia el resultado y redobló la apuesta: el próximo objetivo es la provincia de Buenos Aires.

El PRO busca no quedar afuera del nuevo eje de poder

La derrota encendió las alarmas dentro del partido amarillo, que hoy atraviesa una fuerte crisis de representatividad. En ese contexto, referentes como Cristian Ritondo, Diego Santilli y Guillermo Montenegro buscan acelerar una sociedad política con LLA, a la que ven como tabla de salvación en territorio bonaerense.

La ausencia de Mauricio Macri —actualmente de gira por Perú y Medio Oriente— dejó allanado el camino para que los sectores dialoguistas del PRO avancen en el acercamiento con el oficialismo nacional. Según pudo reconstruirse, no habría grandes obstáculos internos para sellar la alianza, más allá del rechazo que plantea Jorge Macri desde su lugar como jefe de Gobierno porteño, ocupado en recomponer fuerzas en una Legislatura adversa tras el golpe en las urnas.

Pero la correlación de poder cambió. La Libertad Avanza llega a la mesa de negociación con viento a favor y con una lógica clara: todo deberá transcurrir bajo sus propios términos. Así lo hicieron saber desde el oficialismo en la noche del domingo, al abrir las puertas del partido a los dirigentes del PRO que “quieran sumarse” al proyecto libertario.

"Ganó la libertad": euforia libertaria y mensaje a la oposición

Mientras en el PRO los teléfonos ardían, del otro lado del ring las redes sociales explotaban con mensajes de celebración. “Todo marcha acorde al plan” y “¡Viva la libertad, carajo!” fueron algunas de las frases que predominaron entre los legisladores bonaerenses de LLA, que vivieron la elección como un espaldarazo a la gestión de Javier Milei.

“Felicitaciones Manuel Adorni, Karina Milei y Pilar Ramírez por esta histórica elección. Ganó la Libertad. Hay Futuro”, publicó el senador Carlos Curestis, presidente del bloque libertario en el Senado bonaerense. A su vez, compartió un mensaje de Karina Milei en el que reivindicó a LLA como “el único espacio capaz de ganarle al kirchnerismo”.

Sebastián Pareja, presidente del partido en provincia, reforzó la idea: “El Jefe deja todo para que Argentina se tiña completamente de violeta. Lo vamos a conseguir y este equipo va a acompañar la gesta histórica que encabeza Javier Milei para hacerlo realidad”.

Internas libertarias: el caso Espert y el fantasma de la falta de candidatos

Aunque el nuevo escenario fortalece a LLA en términos de negociación, puertas adentro la situación no es tan sencilla. La interna libertaria en Buenos Aires suma tensión a la discusión. El principal punto de fricción: la candidatura de José Luis Espert como diputado nacional.

El economista cuenta con el respaldo explícito de Javier Milei, pero enfrenta la resistencia de Karina Milei, secretaria general de la Presidencia. La paradoja es que, más allá de Espert, LLA no cuenta con figuras de peso en territorio bonaerense, mientras que el PRO aún conserva al mejor posicionado en las encuestas frente al peronismo: Diego Santilli.

Este dato no es menor. A pesar de su debilidad nacional, el PRO sigue teniendo músculo territorial, estructura y nombres conocidos. Eso lo convierte en un socio necesario, pero en posición subordinada.

Denuncias cruzadas y roces previos

La tensión entre ambos espacios no es nueva. El domingo, mientras se celebraban los resultados, desde el entorno de Mauricio Macri denunciaron un operativo libertario para difundir un video en el que el expresidente supuestamente daba de baja la lista encabezada por Silvia Lospennato. El hecho volvió a crispar los ánimos y dejó en evidencia que la relación entre LLA y el PRO no es idílica.

Sin embargo, la urgencia política y la reconfiguración del mapa electoral en la provincia de Buenos Aires fuerzan a ambos sectores a encontrar puntos de acuerdo. Y aunque la alianza no está sellada, el mensaje que dejó la elección en CABA es claro: el liderazgo en la oposición hoy lo tiene Javier Milei, y el que quiera subirse al tren libertario deberá aceptar las condiciones.