Tips para hacer la mejor bondiola al horno

Un plato típico argentino que parece fácil, pero tiene sus secretos. Acá te damos unos consejos para que te salga diez puntos y dejes asombrados a tus amigos y tu familia.

Argentina22 de septiembre de 2023 Redaccion GLP
La bondiola al horno es uno de esos platos típicos de nuestra cocina argentina que están buenísimos. El resultado de esta preparación es una carne muy tierna y jugosa, que está para chuparse los dedos. Pero ¡ojo!, que no es tan fácil de hacer como parece, y hay que evitar algunos errores que te pueden arruinar el sabor. Por eso, GRUPOLAPROVINCIA.COM te trae los mejores tips para que te salga la mejor bondiola al horno, de esas que se cortan con cuchara, y puedas sumarle una estrella a tu delantal de chef hogareño.

• Lo primero que tenés que hacer es elegir una bondiola de buena calidad, que tenga grasa entreverada (el famoso “marmolado”). La grasa le va a dar más sabor y humedad a la carne cuando la cocines.

• Lo segundo que tenés que hacer es marinar la bondiola con tiempo, al menos unas horas antes de meterla al horno. La buena noticia es que podés usar prácticamente lo que quieras: limón, miel, mostaza, salsa de soja, especias, hierbas, y lo que se te ocurra para darle más sabor. Una variante común es usar cerveza negra, que realmente queda muy bien.

• Lo tercero que tenés que hacer es envolver la bondiola en papel aluminio, bien apretado, para que no se te escape el juguito y la marinada. Así evitás que se te seque y se te queme por fuera.

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• El cuarto consejo: cociná la bondiola a fuego lento y parejo, en un horno caliente. El tiempo va a depender del tamaño y el grosor de la bondiola, pero calculale unas tres horas más o menos. ¡Acá no vale apurarse! Cuanto más grande el pedazo de carne, más tiempo va a llevar.

• Quinto tip, polémico: se recomienda dar vuelta la bondiola cada media hora, para que se te cocine por todos lados y se te impregne de la salsa. Hay quienes dicen que esto es un sacrilegio, pero hacenos caso: así es mejor. Además, controlá que no se te quede sin líquido. Si ves que se está secando, agregale agua o caldo (CALIENTE, NO FRÍO) a la fuente.



• Una vez que la bondiola está tierna y dorada (andá espiando cada tanto), ya podés sacarla del horno. Y aquí viene el sexto consejo: no la cortes enseguida. Dejala descansar unos minutos para que no se te vaya el juguito y se asiente el sabor.

• Lo último que te queda es servir la bondiola con lo que más te guste, como puré de batatas, ensalada verde, arroz blanco, etc. También podés acompañarla con una salsa hecha con la marinada o el jugo que te quedó en la fuente.

Siguiendo estos tips, vas a poder hacer la mejor bondiola al horno y disfrutar de un plato riquísimo y nutritivo. Te aseguramos que te va a quedar espectacular y vas a sorprender a todos con esta receta tradicional. ¡Buen provecho!

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