El Gobierno quiere garantizar el voto electrónico en la provincia de Buenos Aires

El Gobierno acelera cambios para que el debate por la Boleta Única Electrónica que ya lleva varias semanas en danza, finalmente se pueda convertir en una ley.

El apuro por sancionar la ley que aplicará la tecnología en la votación, tiene que ver con la cuestión de los tiempos para su implementación, que requiere traer las maquinas y organizar todo un operativo novedoso para el país.

"La BUE es la única alternativa. El dispositivo digital para el recuento no está en discusión. Podemos aceptar que no haya un chip y que exista otro mecanismo, que lo propondrá el Poder Ejecutivo y lo aprobará la CNE", le dijo un alto funcionario a La nación tras la reunión.

El objetivo del gobierno es "llegar", pero por sobre todo, garantizar que la boleta electrónica llegue al territorio bonaerense, no solo por ser el más populoso y extenso, sino donde el peronismo tiene mayor caudal de votos. Adrian Pérez en el Senado había advertido junto a Frigerio que lo que busca evitar con la implementación tecnológica es "el robo de boletas" y "la inexactitud en los resultados", que se deriva del conteo manual.

Por ese motivo, las autoridades del gobierno analizan torcer el brazo frente al reclamo del peronismo, y aceptar remover el chip que consideran "inseguro" y que no garantiza el voto secreto. Con todo, el objetivo final es llegar y sancionar la ley antes del 30 de noviembre.