Familias del AMBA necesitan $144.700 para pagar servicios básicos

El comienzo de 2025 trajo un nuevo golpe al bolsillo de los habitantes del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Según un informe del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP), un hogar promedio necesita $144.775 mensuales para cubrir los costos de transporte, energía eléctrica, gas y agua. Esta cifra representa un aumento del 3% en comparación con diciembre de 2024 y un alarmante 345% respecto de enero del año pasado.

El informe detalla que el incremento mensual se explica principalmente por subas en las tarifas de electricidad (+10,9%) y agua (+1%), mientras que el gas presentó una leve baja del 0,9% debido a la estacionalidad del consumo. Sin embargo, el impacto interanual es mucho más significativo y refleja una realidad insostenible para muchas familias.

Transporte, el servicio con mayor incremento interanual

Entre los servicios públicos, el transporte público sufrió el mayor aumento interanual, con un 385%. Esto se debe a los ajustes tarifarios en colectivos y trenes, donde el costo reconocido por la Secretaría de Transporte para cada boleto es de $927, aunque su valor técnico real debería alcanzar los $1.314. Actualmente, los usuarios en el AMBA pagan apenas $371 por viaje, evidenciando una brecha del 42%.

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Otros servicios también registraron fuertes subas: el gas natural subió un 559%, seguido por el agua con un 321% y la energía eléctrica con un 270%. En términos de impacto en la canasta, el transporte aportó 137 de los 345 puntos porcentuales totales, seguido por la electricidad (94 puntos), el agua (68 puntos) y el gas (46 puntos).

¿Qué representa este gasto en los salarios?

La canasta de servicios públicos en enero de 2025 equivale al 11,7% del salario promedio registrado, estimado en $1.238.608. Entre todos los gastos, el transporte representa el 39%, una proporción significativamente mayor en comparación con los demás servicios básicos.

Además, la carga de las tarifas en los ingresos familiares sigue aumentando debido a la reducción de los subsidios estatales. Durante 2024, la asistencia pública para los servicios disminuyó un 39% en términos reales. En febrero del año pasado, los hogares cubrían el 32% del costo de los servicios, pero para octubre esa proporción escaló al 53% y se mantuvo estable desde entonces.

Perspectivas para 2025

El Gobierno Nacional prevé continuar con la reducción de subsidios en busca de alcanzar el equilibrio fiscal. Esto podría trasladar la totalidad de los costos a los usuarios finales, impactando aún más en los presupuestos familiares.

El caso del transporte público ilustra esta tendencia. Aunque las tarifas actuales ya reflejan aumentos significativos, los costos técnicos reales de prestación del servicio están lejos de ser cubiertos. Esto anticipa nuevos ajustes tarifarios que seguirán golpeando el bolsillo de los argentinos en 2025.

En este contexto, la caída del poder adquisitivo y el impacto desproporcionado de los aumentos tarifarios en los sectores más vulnerables reafirman la necesidad de políticas públicas que equilibren la sostenibilidad fiscal con la protección de los hogares.