El jefe del PSG quiere un cambio inmediato en la direccion tecnica pero Gallardo no es prioridad

El qatarí Nasser Al-Khelaifi, presidente del París Saint-Germain, planteará un cambio inmediato en la dirección técnica del primer equipo pero el argentino Marcelo Gallardo no es prioridad, después del fracaso por la eliminación en los octavos de final de la Liga de Campeones de Europa.
La máxima autoridad del club parisino encabezará en las próximas horas una reunión con la directiva durante la que propondrá la destitución de Christophe Galtier, llegado a principios de temporada como reemplazo del argentino Mauricio Pochettino.
Al-Khelaifi, decepcionado por la derrota de este miércoles ante Bayern Múnich en Alemania, escuchará otras opiniones dentro de la junta como también la del director deportivo, el portugués Luis Campos, y la del delantero Kylian Mbappé, una de las máximas figuras del plantel junto a Lionel Messi y Neymar.
La prensa francesa afirma que el qatarí no quiere sostener al actual entrenador y su candidato para la sucesión es un viejo conocido: el alemán Thomas Tuchel, actualmente desocupado.
Al mando de Galtier, PSG repitió una nueva frustración en Europa, sumada a las competencias perdidas en el ámbito local, donde sólo tiene chances de pelear por la Ligue 1 que lidera con 8 puntos de ventaja sobre Olympique de Marsella.
El diario catalán Sport asegura que Tuchel podría regresar al club tras alejarse a finales de 2020 tras un proceso de dos años y medio. El alemán, de 49 años, fue el único capaz de clasificar al PSG a una final de Champions League, que justamente perdió ante Bayern Múnich en 2020.
Después de ello, el entrenador tuvo su revancha y se consagró campeón continental de clubes con el Chelsea de Inglaterra.
La preferencia de Al-Khelaifi por Tuchel va en desmedro de las posibilidades de Gallardo, una figura reconocida por su paso como futbolista del París entre 2007. Ello y su exitosa etapa como DT de River Plate puso al "Muñeco" en la ola de rumores para la sucesión del actual entrenador, que difícilmente pueda terminar la temporada en el cargo.
Toda esa situación de inestabilidad alcanza también al director deportivo, el portugués Luis Campos, quien dejó entrever su intención de continuar en funciones, según los informes de medios parisinos.
Campos es quien mantiene conversaciones formales para renovar el contrato de Messi, cuya continuidad se transformó en el tema de mayor interés ya consumada la despedida en la Liga de Campeones.
Hasta hoy, el capitán del seleccionado argentino sólo mantuvo contactos con su actual club para la prosecución de su carrera a partir del 30 de junio, al margen de lo revelado por el presidente de Barcelona, Joan Laporta, sobre una reciente charla con Jorge Messi, padre del jugador, en la Ciudad Condal. (Télam)