El rol de Vidal en la elección y la polarización

Vidal, fundamental para la campaña de Cambiemos.

Tal como lo auguraban desde Cambiemos, los precandidatos de esa fuerza obtuvieron una gran elección en todo el país. Si bien aún queda por definir la Provincia de Buenos Aires, el escrutinio provisorio marca una tendencia a favor del oficialismo en el resto de las provincias. Pero sin dudas, la campaña fue y será clave para acompañar el próximo voto en octubre, que será el que designe quiénes finalmente asumirán en el recinto.

En ese sentido, la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, ha sido de fundamental importancia para el "empate técnico" entre Bullrich y CFK, que se resolverá en octubre. Así lo auguraban las encuestas, que la definían como la política con mejor imagen en territorio bonaerense, con un amplio margen por sobre el resto de los políticos, entre los cuales se encontraban los precandidatos de su espacio político.

Las recorridas en los distintos distritos, como así también el paso por los medios de comunicación en los últimos días, previo a las PASO, y en la que se destacó en el episodio que mantuvo con Brancatelli, podrán ser factores clave para tener en cuenta en esta segunda parte de la campaña, ya de cara a las elecciones de octubre.

En ese sentido, el oficialismo continuará utilizando como principal figura a su gobernadora, para acompañar a los candidatos y así elevar su porcentaje de voto, que ahora deberá convencer a aquellos que aún se mostraron indecisos en las PASO, ya sea a través del voto en blanco, como así también a aquellos que reconsiderarán su elección.

Desde el lado de Unidad Ciudadana también afirman que estos votos podrán ser decisivos en la elección, y por ello también apuntarán a ese sector en los próximos dos meses para consolidarse como oposición, fundamentalmente a los obtenidos por la fuerza Cumplir, ya que esta disputa con Florencio Randazzo no fue del todo beneficiosa para CFK.

Además del acompañamiento de la gobernadora, la polarización funcionó para el oficialismo. Presentarse como la opción de cambio, que busca no retroceder al pasado, resolviendo los problemas de la gente, "haciendo lo que hay que hacer" fue fundante para construir un núcleo duro de votantes que terminó replicándose en todo el país y dando frutos inesperados. De la vereda de enfrente, aprovecharon la división para canalizar aquella bronca por los tarifazos, despidos y falta de trabajo, que fue el eje del discurso final de CFK hace pocas horas, luego de revertir la tendencia que la relegaba a un segundo plano.

Con un "empate técnico", que si bien podrá definirse por centécimas en las próximas horas, tanto el oficialismo, como Unidad Ciudadana tienen una ardua carrera hasta octubre, donde finalmente se decida quién ganó y logra conformarse como la principal oposición al gobierno de turno, o termina por consolidar el ascendente camino de Cambiemos.