Polémica por la quita del arancel para importar computadoras

La política de apertura de importaciones de computadoras, notebooks y tablets desde marzo de 2017, abrió un frente de disputa con los sectores de ensambladores nacionales, donde aseguran que habrá una fuerte contracción en los empleos para el sector.

El anuncio oficial de la reduccción a cero del arancel del 35 por ciento desde marzo próximo, puso en estado de alerta a las empresas que fabrican partes para computadoras y notebooks, ubicadas en el área metropolitana de Buenos Aires, y las pymes del interior del país que trabajan en el ensamblaje de computadoras a pedido del cliente.

''En función de las empresas que esperamos que entren en convocatoria y las que cerrarán, creemos que la medida impactará sobre unos 10 mil empleos entre mano de obra directa e indirecta. Quedan afectadas las grandes empresas que arman la placa mother, la memoria RAM, baterías, cables y carcazas y las pymes ensambladoras del interior. Muchas seguirán haciendo mantenimiento y distribución, pero el impacto en el empleo será muy fuerte”, dijo a Página 12, Carlos Simone, de la Cámara Argentina de Máquinas de Oficina, Comerciales y Afines (Camoca).

El objetivo del Gobierno es democratizar el consumo de computadora, sobre todo portátiles, elemento clave para trabajar, y que se encuentra muy por debajo del consumo de celulares. Según estiman, tiene un amplio mercado para crecer. Sin embargo, los empresarios consideran que impactará más en la industria nacional que en el bolsillo de los consumidores.

Según el ministerio de Producción, las computadoras bajarán en un 50 por ciento sus precios pero Cadieel y Afarte coincidieron en que ''la rebaja en el precio al público a lo sumo será de un 20 por ciento ya que hay costos financieros, impositivos, de logística y comercialización que no se modificará''.

La cartera de Francisco Cabrera ya anunció que lanzará un plan integral de subsidios para despidos, que recibirán las empresas para mejorar las condiciones laborales, garantizar su continuidad o garantizar el pago de una parte del salario por parte del Gobierno. Las medidas no estarán exentas de la polémica que se viene con el sector.