Despidos, privatización y cierre: el futuro incierto de Aerolíneas

El Gobierno de Javier Milei sigue adelante con su estrategia de reestructuración del sector aeronáutico, poniendo en jaque el futuro de Aerolíneas Argentinas y de la empresa de rampas Intercargo. El clima de tensión escaló este viernes a niveles críticos, con nuevas medidas drásticas que incluyen despidos en Intercargo y la amenaza de privatización para la aerolínea estatal.

Despidos en Intercargo y desregulación de rampas

El conflicto, que ya lleva semanas afectando la operatividad de los aeropuertos, tuvo un nuevo capítulo en la madrugada del viernes. El secretario de Transporte, Franco Mogetta, confirmó que el Gobierno avanzará con más despidos en Intercargo, tras una serie de medidas de fuerza por parte de los trabajadores de la empresa de rampas. Estos paros, iniciados el miércoles, dejaron a cientos de pasajeros atrapados en los aviones durante horas, lo que obligó al Gobierno a actuar con dureza.

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Mogetta, en diálogo con el periodista Eduardo Feinmann, detalló que están investigando quiénes fueron los responsables de las protestas que afectaron tanto a Aeroparque como a Ezeiza. "Vamos a seguir con la desregulación del servicio de rampas y, de ser necesario, privatizar Intercargo", expresó el funcionario, dejando claro que el Gobierno está dispuesto a ir hasta las últimas consecuencias con la reestructuración del sector.

La amenaza de privatización para Aerolíneas Argentinas

Pero la verdadera preocupación del Gobierno está en Aerolíneas Argentinas. En medio de un conflicto salarial con los gremios aeronáuticos, el futuro de la aerolínea bandera está al borde del abismo. En sus declaraciones, Mogetta dejó claro el ultimátum: “Aerolíneas se privatiza o se cierra. No vamos a seguir financiando una empresa que le costó al Estado 8 mil millones de dólares durante el kirchnerismo”, sentenció el secretario de Transporte.

A partir de esta tarde, se retomarán las negociaciones entre las autoridades de Aerolíneas Argentinas y tres gremios aeronáuticos del ala dura: APLA (Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas), AAA (Asociación Argentina de Aeronavegantes) y APA (Asociación del Personal Aeronáutico). Si no se llega a un acuerdo, el Gobierno seguirá adelante con su plan de privatización, y en el peor de los casos, podría cerrar la empresa.

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En Aerolíneas Argentinas, el clima es de total incertidumbre. Según fuentes cercanas a la Casa Rosada, el Gobierno espera que los gremios presenten propuestas concretas para reformar la estructura de la compañía. “El acuerdo no debe limitarse a un ajuste salarial, sino a un plan integral de transformación”, afirmaron desde el Ejecutivo. En caso de que los gremios no accedan a la propuesta, se implementaría un procedimiento preventivo de crisis, lo que podría derivar en despidos masivos o en una posible quiebra de la aerolínea.

¿El fin de Aerolíneas Argentinas?

En la actualidad, Aerolíneas cuenta con una flota de 20 aviones Embraer heredados de la fusión con Austral, mientras que el resto de las aeronaves son alquiladas bajo el sistema de leasing. Este modelo, que se ha mostrado insostenible a lo largo de los años, ha sido una de las razones por las que el Gobierno considera que es el momento de dar un giro radical en la gestión de la empresa.

Los gremios, por su parte, están bajo presión. Tras el reciente despido de 15 trabajadores en Intercargo, la Asociación del Personal Aeronáutico (APA) y otras agrupaciones sindicales han convocado nuevas protestas y asambleas, lo que agrava aún más el panorama. En la reunión de esta tarde, se analizarán propuestas de los sindicatos, pero también se hará un planteo firme de parte de la compañía sobre los cambios necesarios en los convenios colectivos.

La batalla por el control del sector aeronáutico

El conflicto entre el Gobierno y los gremios se ha intensificado no solo por el futuro de Aerolíneas Argentinas, sino también por el control de Intercargo, el cual hasta ahora operaba bajo el Estado. En sus últimas declaraciones, el vocero presidencial, Manuel Adorni, afirmó que la desregulación del servicio de rampas es solo el primer paso hacia la privatización total de Intercargo. “Es el fin de Intercargo tal como lo conocemos”, sentenció.

A medida que el conflicto se profundiza, los gremios aeronáuticos se enfrentan a una encrucijada: si persisten en las medidas de fuerza, el Gobierno podría endurecer su postura aún más, lo que derivaría en mayores recortes y una posible crisis laboral. Por otro lado, si optan por flexibilizar su postura, se arriesgan a perder poder de negociación frente al Gobierno, lo que podría abrir la puerta a una privatización total del sector.

Reunión clave entre el Gobierno y los gremios

Este viernes a partir de las 14:00, se reanudará el diálogo entre Aerolíneas Argentinas y los gremios. En la mesa de negociación estarán representados los tres principales sindicatos: APLA, AAA y APA. Las expectativas son altas, pero la sensación generalizada es que las horas que siguen podrían definir el futuro del transporte aéreo en Argentina.