UCR bonaerense: el oficialismo busca destrabar la crisis interna y evitar una intervención

La interna de la Unión Cívica Radical (UCR) en la provincia de Buenos Aires se encuentra en un punto crítico. Luego de un plenario que no logró definir la conducción del partido, se apuesta a la conformación de una mesa política que destrabe la situación antes del viernes. Con el reloj en contra, la dirigencia radical intenta evitar un escenario de intervención por parte de la Justicia o del Comité Nacional.

Una votación ajustada

El plenario del radicalismo bonaerense tuvo lugar el miércoles y dejó en evidencia la fuerte división dentro del partido. La propuesta oficialista de conformar un comité de contingencia para conducir la UCR hasta que la Justicia resuelva el conflicto por la elección interna no alcanzó los dos tercios necesarios para su aprobación, quedando en 17 votos a favor sobre un total de 26.

Lejos de dar la discusión por perdida, el plenario pasó a un cuarto intermedio hasta el viernes a las 18 horas, tiempo en el cual se buscará consolidar un acuerdo en la mesa política. Esta instancia fue una iniciativa de la oposición, a través de Rodrigo Galetovich, y busca integrar a los sectores enfrentados en la interna.

Álvarez criticó la aprobación del DNU: "Vuelve a poner de rodillas a nuestro país frente al FMI"

Si el viernes no se llega a una solución, la Convención Provincial, presidida por Carlos Fernández, podría asumir la conducción de acuerdo con el artículo 94 de la Carta Orgánica. Sin embargo, este órgano tiene mandato hasta el 22 de abril, lo que daría apenas un mes de margen para evitar la intervención del Comité Nacional o de la Justicia.

“El objetivo es claro: evitar que el partido quede acéfalo y que se nos imponga una intervención desde Buenos Aires o la Justicia. Tenemos que llegar a un consenso interno y respetar los procedimientos que marca nuestra Carta Orgánica”, afirmaron fuentes del oficialismo.

Acusaciones cruzadas y la disputa por el futuro del partido

La tensión interna en la UCR bonaerense no es nueva, pero se ha intensificado en los últimos meses tras la resolución de la Cámara Nacional Electoral (CNE), que ordenó repetir la votación en algunas mesas impugnadas. Desde Futuro Radical acusan al oficialismo de buscar “ganar tiempo” para evitar nuevos comicios y señalan que el verdadero trasfondo es la estrategia política hacia 2025.

“Quieren llevar el partido hacia un acuerdo con el PRO y Milei”, sostuvieron desde la oposición. Frente a estos señalamientos, el oficialismo negó cualquier maniobra irregular y aseguró que están actuando conforme a los estatutos partidarios. “No estamos manipulando nada. La Carta Orgánica establece claramente los procedimientos para la creación del comité de contingencia”, respondieron.

El tiempo corre y la definición es inminente

Con el plenario abierto hasta el viernes, las próximas horas serán claves para determinar el futuro del radicalismo bonaerense. Si la mesa política logra un consenso, se podría destrabar la conformación del comité de contingencia. De lo contrario, el partido quedará a merced de una intervención que nadie quiere.

Mientras tanto, la interna radical se superpone con otros debates cruciales, como la posible suspensión de las PASO en la provincia de Buenos Aires. La definición de la conducción del partido no solo impactará en la organización interna, sino también en la estrategia electoral de la UCR en un año político cargado de tensiones y reacomodamientos.

El oficialismo confía en que el acuerdo será posible, pero la incertidumbre sigue latente. La UCR bonaerense se enfrenta a una decisión que definirá su rumbo en los próximos años y que podría marcar el destino de una de las principales fuerzas opositoras en la provincia.